Las agremiaciones médicas han cuestionado duramente que se haya aprobado en el Congreso un artículo que cambia de medios a resultados las obligaciones que se asumen al tratar a un paciente, contraviniendo preceptos legales, constitucionales, científicos y dogmáticos.
La reforma a la salud que se discute en el Congreso de la República sigue siendo objeto de críticas por parte de varios sectores médicos y científicos, esta vez, la discusión se centra en un artículo que estaría desconociendo las dinámicas propias del ejercicio y cambiando el sentido de las obligaciones que se asumen con el mismo.
A través de un comunicado de prensa, la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas (Acsc), mostró su descontento por la orientación que desde el Gobierno se le viene dando a la medicina como práctica profesional, asegurando que los nuevos preceptos establecidos podrían ser contraproducentes.
“Se vienen presentado situaciones puntuales en el articulado que se viene aprobando que, lejos de resolver o desarrollar la Ley Estatutaria, de aprobarse, van a generar desmejoras en el ejercicio de la medicina que es una de las bases esenciales de la prestación del servicio de salud”, se le en el documento.
El descontento de los agremiados se centra en el artículo 123 de la iniciativa legislativa que impone a los profesionales de la salud el cumplimiento de situaciones que están fuera del alcance de su experticia, contraviniendo postulados científicos, legales, constitucionales y dogmáticos que deslindan a la medicina de la resolución de » los aspectos relacionados con la salud de los pacientes», como establece el artículo en comento, aprobado por el legislativo.
Sobre el particular, advierte la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas, que “el ejercicio de la medicina genera para el profesional obligaciones de medio basadas en la competencia profesional, esto ha sido reconocido a nivel legal a través del artículo 26 de la Ley 1164, acompañado por la jurisprudencia extensa e histórica de las altas cortes, y por la misma medicina basada en la evidencia”.
Aseguran que la carga que impone el artículo 123 de la reforma a la salud está abiertamente en contra de toda la demostración científica y literatura jurídica que aborda a profundidad el tipo de obligaciones que asume el médico a la hora de brindar atención a un paciente.
A esta crítica se sumó la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación (Scare), agremiación que fue más allá de las modificaciones en las obligaciones de los médicos y cuestionó que se les impusiera a los profesionales de la salud la carga de información que a su juicio, deben soportar entidades prestadoras y promotoras de salud.
“El texto presenta otras imprecisiones que demuestran desconocimiento en el proceso de atención en salud y afectan gravemente el ejercicio profesional de médicos y especialistas, debido a que le ordena al profesional que debe regular visitas y definir e informar el personal especializado disponible para la atención; lo cual no se encuentra dentro de su ámbito de actuación, sino que corresponde, a las redes, IPS o gestoras”, dice la nota de prensa emitida por Scare.
También se refirió al asunto al destacada epidemióloga Zulma Cucunubá, quien a través de su cuenta de Twitter explicó que la resolución de los asuntos de un paciente resulta muchas veces imposible, incluso, teniendo a la mano insumos, equipos e instalaciones. “Esto me parece muy grave. Se les está exigiendo a los médicos que hagan algo en muchos casos imposible. En muchos casos, ni con la mejor atención y tecnología logran resolverse”, trinó la destaca profesional de la salud.
Por su parte, la Asociación Nacional de Profesiones de la Salud (Assosalud) sostiene que son muchos los factores que deben tenerse en cuenta y concurrir para que haya una verdadera ‘curar’ las afecciones de un paciente y advierten que la inclusión del verbo resolver en el artículo en comento, provocaría un efecto alcista en las pólizas y seguros que adquieren los que se dedican a esta actividad.
“Dejar en la Ley el verbo resolver, implicar que el costo de las pólizas de responsabilidad médicas tanto profesionales como institucionales se vuelvan impagables o ni siquiera sean ofrecidas por las aseguradoras. Esta norma pone al médico en una condición frente a la sociedad imposible de cumplir, ni en Colombia ni en ningún país del mundo, desconoce sus limitaciones y lo expone a incumplir su juramento frente a la sociedad”, dice el documento publicado en las redes sociales de Assosalud.
Finalmente, solicitan que en el desarrollo del debate sean tenidas en cuentas las recomendaciones que se han venido haciendo desde las distintas asociaciones médicas y científicas en aras de estructurar colectivamente y con sustento técnico un articulado realista que beneficie a la sociedad colombiana en pleno.