Tras recuperar su libertad, alias Gafas es protagonista de este grupo ilegal, desafiando al Estado y burlándose del proceso de paz, mientras las Fuerzas Militares intensifican sus operativos para desmantelar estas organizaciones armadas que amenazan la seguridad en el Cauca.
Alexánder Farfán Suárez, conocido como alias Gafas, exguerrillero de las FARC, recordado como el carcelero de Íngrid Betancourt, ahora es uno de los líderes del bloque Occidental Jacobo Arenas.
Desde esta organización delincuencial se encarga de labores de adoctrinamiento en el Cauca, específicamente en el cañón del Micay, El Patía y El Tambo, Cauca, de acuerdo con lo revelado por el periódico El Tiempo.
Alias Gafas estuvo involucrado en la entrega de la concejal Sandra Betancourt, quien había sido secuestrada el pasado 12 de septiembre por las disidencias que se hacen llamar Carlos Patiño.
En un acto intimidante, Gafas amenazó a la concejal durante su liberación en un polideportivo ante la comisión de derechos humanos, advirtiéndole que no podía regresar a Argelia, lo que evidencia su control en la región.
«No sé cómo va a hacer para poder seguir siendo concejala, pero usted no puede volver al Cauca, es mejor que esto sea así para evitarnos problemas, pero usted debe salir del departamento, todos los frentes del comando conjunto del occidente tienen la consigna de hacer cumplir esto”, le dijo alias Gafas delante de los integrantes de la comisión humanitaria, los alcaldes de Argelia y Patía, Osman Guaca y Jhon Fuentes.
Gestor de paz
A pesar de su oscuro pasado, el presidente Gustavo Petro nombró a alias Gafas como gestor de paz en medio de las negociaciones con las disidencias.
Sin embargo, este nombramiento se ha convertido en un motivo de controversia, ya que Farfán ha desafiado abiertamente al Gobierno y ha vuelto a las armas.
“¿Y qué quiere usted que yo haga? Las convicciones políticas no se venden”, le dijo el guerrillero a SEMANA.
Aunque el Gobierno Petro no se ha pronunciado, líderes sociales y políticos han rechazado que se nombre como gestores de paz a quienes salen de las cárceles y vuelven a delinquir, un verdadero desgaste.
Historia
Con un pasado marcado por la violencia, Farfán fue capturado durante la Operación Jaque en 2008 y se había sometido a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), de la cual fue expulsado en noviembre de 2023 por continuar delinquiendo.
Su regreso al crimen se alinea con su reciente reconocimiento como negociador de paz de las disidencias, lo que ha generado un debate sobre la efectividad de la política de paz del Gobierno.