La falta de nutrientes esenciales debido a sus malos hábitos alimenticios le impidió a su organismo luchar contra una infección. Sociedad médica recalcó la importancia de seguir dietas equilibradas.
Zhanna Samsonova, la influenciadora rusa conocida como Zhanna D’Art, perdió la vida debido a la dieta vegana que llevaba desde hace años. Su deceso se produjo después de buscar un tratamiento durante una gira por el sudeste asiático, específicamente en Malasia.
De acuerdo con los informes médicos, la muerte de Zhanna se debió a una infección similar al cólera que su organismo no pudo combatir debido a la falta de nutrientes esenciales debido a su dieta desequilibrada y deficiente.
Mortal dieta vegana
Zhanna D’Art llevaba diez años de una estricta dieta vegana, basada en frutas, brotes de girasol y zumos. A través de las redes sociales ofrecía consejos para tener una vida sana a través de la mencionada alimentación crudivegana.
Según fuentes cercanas a Zhanna, la mujer llevaba seis años sin beber agua, por lo que su hidratación venía única y exclusivamente de los zumos y batidos que se preparaba con frutos exóticos.
“Veo cómo mi cuerpo y mi mente se transforman todos los días”, reconoció en su perfil de Instagram. Todo ello mientras describía, con todo lujo de detalles, esa dieta tan sumamente exhaustiva que llevaba a cabo.
“Amo mi nuevo yo y nunca voy a volverá los hábitos que solía usar», revelaba antes sus más de 12.000 seguidores. En sus escritos hablaba de las supuestas bondades de su estilo de vida que, según ella, ayudaba a tener un cuerpo completamente sano y a no envejecer.
Le advirtieron
Vera Samsonova, madre de la influenciadora, manifestó que en varias ocasiones trató de convencer a su hija para que abandonara esa dieta tan radical, pero ella nunca estuvo de acuerdo.
Además, uno de sus amigos contó que la mujer se veía exhausta y sufría de piernas hinchadas, pero se negaba a buscar tratamiento adecuado. Varios de sus allegados estaban preocupados por su estado de salud, pero Zhanna parecía estar convencida de que todo estaba bien.
Equilibrio nutricional
La trágica muerte de Zhanna Samsonova prendió las alarmas en la sociedad médica y nutricionista que recalcaron la importancia de seguir dietas equilibradas y ricas en nutrientes y de consultar con especialistas antes de implementar cualquier tipo de dieta extrema, especialmente si se pretende eliminar grupos de alimentos completos ya que cada persona tiene necesidades nutricionales únicas y seguir dietas sin supervisión médica puede ser peligroso.
De acuerdo con un estudio publicado recientemente en el Journal Nutrition, el 100 % de los participantes en una dieta vegana ingerían menos de 2.4 mg de vitamina B12 recomendada diariamente.
La falta de esta vitamina y otros nutrientes esenciales, como el calcio, la vitamina D, proteínas, ácidos grasos omega, hierro, zinc y yodo, pueden tener graves consecuencias para la salud.
La carne, gran aliada para combatir la anemia
El hierro es un mineral esencial para la salud y para garantizar el correcto desarrollo del cuerpo humano. Su principal función en el organismo es fabricar en la médula ósea la hemoglobina, una proteína encargada de transportar el oxígeno de los pulmones al resto de los órganos y músculos.
Recientemente, el Instituto Nacional de Salud (INS) presentó los resultados del análisis profundo de la Encuesta Nacional de Situación Nutricional (ENSIN 2015) que muestra cifras preocupantes sobre el estado nutricional de los colombianos.
El estudio presenta cómo están los niños y mujeres embarazadas, respecto a micronutrientes fundamentales para el crecimiento y el desarrollo de las nuevas generaciones como los son: el hierro, la vitamina A y el zinc.
Riesgo presente en la población colombiana
En general, el informe concluye que la malnutrición o la desnutrición oculta es considerada un riesgo presente en toda la población colombiana y su prevalencia es mayor en grupos indígenas, afrocolombianos y con factores como la pobreza y la ubicación geográfica en zonas rurales dispersas.
“Y aunque un porcentaje importante de colombianos no tiene problemas de seguridad alimentaria, sí tiene una inadecuada ingesta de estos nutrientes vitales, por lo tanto su deficiencia genera retraso de crecimiento, afectando el desarrollo mental y la capacidad inmunitaria de niños y niñas; además, la persistencia de la malnutrición limita y condiciona la producción intelectual y el desarrollo de la población”, expresó el INS.
Ana María Ángel, presidenta del Colegio Colombiano de Nutricionistas Dietistas (COLNUD), sostiene que cuando una persona tiene deficiencia de hierro, desarrollará una enfermedad muy común llamada anemia ferropénica.
Añade que quienes padezcan de este tipo de anemia no solo tendrán problemas de debilidad, cansancio e irritabilidad, sino que también podrían ver afectada su salud cardiovascular y hormonal, así como la formación de los tejidos conectivos. La deficiencia de hierro es un problema de salud grave que tiene consecuencias negativas para el rendimiento físico y mental de los adultos, así como para el desarrollo cognitivo y físico de los niños.
¿Cuáles son las causas?
“No hay un motivo único por el cual se pueda presentar la anemia por falta de hierro. Es común en el caso de personas que hayan tenido una pérdida de sangre considerable (por enfermedades inflamatorias, autoinmunes, cáncer, úlceras o incluso períodos menstruales abundantes), también puede presentarse en mujeres en estado de embarazo que no estén tomando suplementos de hierro y en pacientes que periódicamente tomen medicamentos como la aspirina. Otra de las razones frecuentes por las cuales se presenta esta deficiencia es por una dieta baja en carne de res, cereales, algunos vegetales y alimentos con vitamina C”, dijo la integrante del Comité Técnico-Científico de Fedegán-FNG.
¿Cuál es el tratamiento?
Según la causa, las estrategias para controlar la anemia ferropénica varían. En términos generales, la recomendación más importante es llevar una alimentación balanceada, rica en nutrientes y vitaminas. Para ello, es fundamental incorporar productos ricos en hierro tales como la carne de res; legumbres como los fríjoles y las lentejas; frutos secos; vegetales de hojas verdes como el kale y la espinaca y cereales fortificados.
También es clave no perder de vista la ingesta de otros nutrientes tales como el ácido fólico y la vitamina B12, que se encuentran en frutas, vegetales, cereales integrales y productos lácteos. Otra vitamina fundamental es la vitamina C, la cual ayuda a garantizar la correcta absorción de hierro en el organismo. Papaya, piña, melón, naranjas, tomates, brócoli, fresas y pimentones son algunos ejemplos de alimentos que deberían incorporarse en la dieta para optimizar la absorción de este mineral.
Los suplementos multivitamínicos no deberían estar descartados, y tomarlos dependerá de las indicaciones que dé el médico de cabecera.
¿Cuánto hierro es necesario?
En promedio, una mujer adulta en edad fértil necesita alrededor de 18 miligramos de hierro por día, mientras que una embarazada va a requerir alrededor de 27 miligramos. Los hombres no necesitan de tanto hierro: aproximadamente entre 8 y 11 miligramos diarios según su edad.
La importancia de la carne para tratar la deficiencia de hierro
De todos los alimentos que son fuente de hierro, las vísceras y en general, las carnes, son la opción más idónea pues el organismo absorbe cinco veces más este mineral cuando proviene de fuentes animales (a este tipo de hierro se le llama hierro hemo). Para hacerse una idea general, una porción de 100 gramos de hígado de res tiene 17 miligramos de hierro y 100 gramos de lomo de res, es decir una porción pequeña, tiene aproximadamente 1,2 miligramos del mineral.
El hierro no hemo, presente en los productos vegetales, solo llega a absorberse por el organismo en un cinco por ciento. Así que por muchos 3,3 miligramos de hierro que tenga una porción de 100 gramos de lentejas cocinadas, es importante entender que su absorción no será completa.
En ese sentido, es recomendable que los vegetarianos o aquellos que no comen carne, se aseguren de que estén ingiriendo la cantidad suficiente de hierro mediante el consumo abundante de legumbres y vegetales o de lo contrario, podrían necesitar la toma de algunos suplementos vitamínicos.
Mitos y verdades sobre el consumo de la leche
Aunque la leche ofrece un valor nutricional muy alto, y es un alimento cuyos beneficios para el organismo son irrefutables y comprobados en la cotidianidad de millones de personas alrededor del mundo. En las últimas décadas han surgido teorías sobre su supuesto perjuicios al organismo por su consumo en edades adultas, los cuales en realidad están asociados a condiciones de salud particulares o al consumo sin control de alimentos con altos niveles de grasa, azúcar y demás, en el que los lácteos simplemente entran de forma ocasional.
La nutricionista y dietista Bertha Forero sostiene que sí existe una condición común que puede ser asociada al consumo de leche: la intolerancia a la lactosa. La leche, al igual que otros miles de alimentos, contiene su propio tipo de azúcar, llamada lactosa, que es disacárido compuesto por galactosa y glucosa.
“La lactosa se divide en el intestino delgado, gracias a la lactasa, que es enzima producida en el borde de las vellosidades del intestino. La intolerancia a la lactosa se presenta cuando los bordes de estas vellosidades se vuelven cuadrados y la lactasa no se produce de manera eficiente, por lo que la lactosa sigue su curso sin dividirse, causando dolor abdominal, gases, diarrea y otras dolencias. Hay personas que nacen con esta condición, y otros que la desarrollan con el tiempo, aunque no hay un promedio de edad establecido”, explicó la experta.
Añadió que la buena noticia es que existen muchos alimentos lácteos que ya solucionan este problema y se pueden consumir sin preocupaciones. El más conocido actualmente es la leche deslactosada, que viene con lactasa, por lo que esta divide la glucosa y la galactosa desde su empaque, y estas sustancias pueden ser absorbidas por el intestino sin mayores contratiempos.
Otros productos, como el yogur y el kumis cuentan con bacterias beneficias que dividen la lactosa y también sirven como una alternativa alimenticia con todas las bondades nutricionales de la leche, pero sin afectar a quienes presentan intolerancia a la lactosa.
“Con los quesos y semimadurados y madurados también pasa igual, por lo que quesos tipo brie, manchego, holandés, parmesano y cheddar, por ejemplo, son una buena opción para las personas que presentan intolerancia a la lactosa”, dijo Bertha Forero.
Por otro lado, los quesos frescos, que son muy populares en Colombia, como el queso campesino y la cuajada, sí presentan inconvenientes para las personas con intolerancia a la lactosa, ya que tienen un grado de maduración mucho menor, en donde las bacterias benéficas no alcanzan a dividir la lactosa.
La nutricionista indicó que, para los que son fanáticos de estas variedades de queso, o de la leche entera, pero presentan intolerancia, pueden pensar en suplementos de lactasa, que suelen venderse en capsulas, pero sería conveniente antes consultar a un médico o un nutricionista.
“Finalmente, no existe ninguna condición médica o enfermedad crónica que impida a grandes grupos poblacionales desterrar totalmente a la leche y sus beneficios de sus vidas, pero si existen algunos casos participarles de personas con condiciones de salud muy específicas que se ven forzadas a renunciar totalmente a los lácteos. Por ejemplo, situaciones aisladas, como a las personas a las que les extraen la vesícula biliar”, concluyó.