Las dos mujeres que iniciaron con ella el pasado 20 de julio, no alcanzaron a durar ni tres meses, ambas tuvieron que renunciar debido al maltrato ejercido por la representante y algunos de los ‘machos cabríos’ que integran su UTL.
Por Germán Hernández Vera
34.521 huilenses hoy deben estar decepcionados de la política, pero sobre todo de la representante a la Cámara por el Huila, Leyla Marleny Rincón. Ellos -y sobre todo ellas- votaron por un proyecto que prometía dignificar la política, legislar por el respeto de todos, en especial de las mujeres, propendiendo por un trato digno y equitativo, entre otras muchas promesas bonitas, sin embargo, hoy la realidad es que la representante Leyla está siendo incoherente con su discurso, convirtiéndose en auspiciadora y cómplice de las practicas que prometió abolir.
Una de las demostraciones más fehacientes de su misoginia (aversión a las mujeres o falta de confianza en ellas) y de machismo (actitud o manera de pensar de quien sostiene que el hombre es por naturaleza superior a la mujer) es que en su Unidad de Trabajo Legislativo no hay ninguna mujer. Todo indica que a la representante no le gusta el trabajo de ellas, menos si es de su tierra, el Huila.
Las dos mujeres que iniciaron con ella el pasado 20 de julio, no alcanzaron a durar ni tres meses, ambas tuvieron que renunciar debido al maltrato ejercido por la Representante y algunos de los ‘machos cabríos’ que integran su UTL, prácticas sistemáticas que podrían enmarcarse en acoso laboral y violencia de género.
La primera víctima fue Judy Cetina, comunicadora social y periodista que ha laborado en el Congreso hace más de 10 años sin ningún problema ni reparo en sus anteriores cargos, por el contrario, reconocida por su profesionalismo y buen desempeño laboral. A Judy la contrataron como jefe de prensa de la Representante, pero al parecer no le cayó bien a varios de los misóginos integrantes de la UTL, razón por la que un día decidieron ignorarla, no contarle nada, ni siquiera los detalles de la agenda de la Representante, lo que le imposibilitó realizar su trabajo. Para terminar de aburrirla y buscar su renuncia, Leyla decidió no hablarle, no contestarle el teléfono, desconocerla por completo, por lo que Judy, en una actitud muy profesional, decidió renunciar.
La segunda fue Gina Piragauta, al igual que Judy, una reconocida comunicadora, candidata a magister en la USCO, con más de 20 años de experiencia en medios locales y nacionales. La historia de Gina es más triste que la de Judy. Ella trabajó en la campaña de Leyla con total compromiso y dedicación, también en la campaña de Petro desde el Huila, en esta última sacrificando el tiempo de sus hijos y sin recibir pago por su trabajo.
Luego del triunfo de Leyla en la Cámara de Representantes (la tercera votación más alta en el Huila), a Gina Piragauta le ofrecieron un puesto en el gobierno nacional, pero Leyla le pidió no aceptar para que trabajara con ella. Se entendió que iba a ser parte de la Unidad de Trabajo Legislativo de la Representante. Lo cierto es que pasó le primer mes, la UTL se llenó y a Gina solo le ofrecieron dos millones de pesos, sin ningún vínculo con el Congreso y sin pago de seguridad social, lo que definitivamente fue una bofetada. Lo peor para Gina fue ver que en la UTL de Leyla estaban vinculados algunos allegados a la profe, caso Óscar Huber Zúñiga Córdoba, expersonero de Neiva, con una asignación mensual de 11 millones de pesos.
Ante los muy justificados reclamos de Gina, la representante hizo lobby para que le dieran un contrato en la oficina de prensa de la Cámara de Representantes. Efectivamente le dieron una prestación de servicios que va hasta el próximo 20 de diciembre y cualquiera diría que le cumplieron. Pues no, esa es una de las más viejas prácticas en el Congreso. Gracias al “favor recibido”, Gina debía, por la misma plata, trabajar para la oficina de prensa de la Cámara y para Leyla. La Representante le dejó de dar a Gina los dos millones. Son varios los periodistas que tienen que acceder a esta práctica, como lo denunció recientemente La W Radio.
Un miembro de la UTL de Leyla que por obvias razones pidió no revelar su identidad, me contó con indignación todas las humillaciones por las que tuvo que pasar Gina. “No la tenían en cuenta para nada, si ella proponía algo la ignoraban, pero si la misma propuesta salía de otro integrante de la UTL, era aceptada e implementada. Fue tal el matoneo contra Gina que la Representante la dejó de llamar por el nombre para decirle “Lagrimitas Piragauta” y todo porque ella a diario exigía respeto e igualdad”, narró.
Gina, como siempre muy profesional, está cumpliendo a cabalidad con su contrato en la oficina de prensa de la Cámara, pero se alejó de la representante, lo que no gustó mucho. La relación entre Leyla y Gina se terminó completamente cuando Gina le contó que trabajaría como jefe de prensa del concejal de Neiva Amín Losada, uno de los más fuertes enemigos políticos de la profe durante su paso por el cabildo capitalino.
Y hay otra afectada. Una mujer que ayudó mucho en la campaña de Leyla fue la bióloga Patricia Torres, a quien también dejaron como la guayabera, por fuera. Ella le hizo lobby a la representante durante varias semanas, hasta que entendió que la habían utilizado.
La UTL de Leyla sigue cambiando cada mes, solo que el único beneficiado es Oscar Huber Zúñiga Córdoba a quien le suben sus honorarios (le reducen a los asistentes, que son los que menos ganan, para dárselos a él).
Pocas Iniciativas Parlamentarias
En el Congreso y en el partido (Pacto Histórico), dicen que Leyla y su equipo hablan mucho, pero hacen poco.
Revisando la página del Congreso en el aparte de la Representante Leyla, aparece una lista de proyectos supuestamente presentados por ella y así lo han vendido en videos y boletines difundidos en redes. “Proyecto para la creación del Ministerio de Igualdad, el de Indulto y amnistía, el de Regulación del cannabis, el de Reforma a la Ley 397 de 1997, el de Jurisdicción Agraria, Soacha Distrito Especial, Cigarrillos electrónicos, Prohibición de prácticas taurinas, Eutanasia, Alimentación y Semillas transgénicas. Pues ninguno de los anteriores es de la autoría de la representante y su Unidad de Trabajo Legislativo, simplemente ha sido ponente, lo que comprueba su débil gestión.
Y es débil porque definitivamente la representante Leyla no se siente cómoda en el Congreso. Dicen los más cercanos que todos los días reniega de su trabajo diciendo que preferiría estar cuidando a su nieto que estar sentada en su curul, pero dice que no renunciará porque al hacerlo le entregaría la curul a Orlando Beltrán, su gran enemigo político y eso jamás lo permitirá.
Como vemos, de la profe Leyla que muchos aplaudimos y que votamos, (me incluyo), ya no queda nada. El poder político la convirtió en una persona misógina y machista, incluso varios de los consultados aseguran que quien realmente está llevando los hilos de la curul es el ex personero Óscar Huber Zúñiga Córdoba, quien hace y deshace en la UTL de la profe.