Desmantelada red de tráfico de migrantes y documentos falsos en Colombia

Las capturas se efectuaron en Bogotá, Antioquia, Cesar, Amazonas, La Guajira, y Sucre.

Un total de 31 personas fueron capturados por presuntamente estar implicados en la oferta de servicios ilegales a migrantes para obtener documentos de identidad colombianos de manera fraudulenta.

Así lo confirmó el coronel Edwin Urrego Pedraza, director de Investigación Criminal e Interpol, quien destacó la labor conjunta realizada durante tres años entre las autoridades colombianas y diversas entidades tanto nacionales como internacionales para desarticular esta red criminal.

«Después de tres años de actividades investigativas y coordinados con la Fiscalía General de la Nación, la Registraduría Nacional, el Ministerio de Relaciones Exteriores, FUPAT y el Servicio de Seguridad Diplomático de la Embajada Americana de los Estados Unidos, se logró la captura de 31 personas que hacían parte de una red criminal dedicadas al tráfico de migrantes a través de la modalidad de entrega de documentos fraudulentos», declaró el coronel Urrego Pedraza.

La red desmantelada estaba integrada por tres funcionarios activos y seis exfuncionarios de la Registraduría Nacional, así como tres funcionarios activos y tres exfuncionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Su modus operandi consistía en la expedición ilegal de cédulas de ciudadanía y pasaportes colombianos a ciudadanos, principalmente dominicanos, quienes pretendían utilizar estos documentos para emigrar a otros países como México y Europa.

Las autoridades llevaron a cabo una serie de allanamientos en varias regiones del país, incluyendo Bogotá, Antioquia, César, Amazonas, Guajira, y Sucre, donde se materializaron las capturas por orden judicial.

Como resultado de este operativo, la Registraduría Nacional canceló más de 244 cédulas de ciudadanía fraudulentas que habían sido emitidas por esta red criminal.

El coronel Urrego Pedraza enfatizó la importancia de estos golpes contra las estructuras criminales que afectan las fuentes de financiación de grupos armados y organizaciones delictivas. Este operativo representa un avance significativo en la lucha contra el tráfico de migrantes y la falsificación de documentos en Colombia.