Capturaron con fines de extradición a cerebros financieros de organización narcotraficante

En un operativo conjunto entre la Policía Nacional y la DEA, fueron detenidos Camilo Betancourt alias «Max» y Laura Gutiérrez alias «Chola», señalados de lavar más de USD $44 millones anuales y coordinar envíos de droga mediante semisumergibles hacia Estados Unidos.

La Policía Nacional de Colombia, en coordinación con la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA), capturó en Cali a dos presuntos líderes de la organización criminal transnacional «Black», dedicada al narcotráfico y lavado de activos a gran escala.

Los detenidos, identificados como Camilo Betancourt Rosero, alias «Max», y Laura Gutiérrez, alias «Chola», son requeridos por la justicia estadounidense y fueron capturados con fines de extradición tras un minucioso trabajo de inteligencia que permitió ubicarlos en la capital vallecaucana.

Según las autoridades, Betancourt Rosero era el principal articulador financiero de la organización, responsable de blanquear más de USD $44 millones al año provenientes del tráfico de estupefacientes. La red criminal mantenía estrechos vínculos con la Coordinadora Guerrillera del Pacífico, estructura armada que opera principalmente en el departamento de Nariño.

«Esta organización utilizaba una flota de semisumergibles para transportar cocaína hacia Estados Unidos, México y países de Centroamérica, aprovechando rutas marítimas del Pacífico colombiano», explicó el director de la Policía Judicial en rueda de prensa.

En ese mismo sentido, precisó que las investigaciones revelaron que alias «Max» no solo coordinaba el lavado de activos, sino que también financiaba la construcción de submarinos artesanales y la compra de armamento para proteger las rutas del narcotráfico. Por su parte, «Chola» habría sido responsable de coordinar los envíos y mantener contactos con carteles internacionales.

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ya había incluido a Betancourt en su lista de narcotraficantes designados, señalándolo como socio de miembros de la Segunda Marquetalia y del Cártel de Sinaloa para la distribución de estupefacientes.

Finalmente, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, destacó la importancia de estas capturas. «Este golpe representa un avance significativo en nuestra estrategia contra las finanzas del crimen organizado. Seguimos demostrando que en Colombia el crimen no paga y que la cooperación internacional es clave para desmantelar estas estructuras criminales», puntualizó.