Asesinato de teniente coronel sacude a Popayán y prende alarmas en las Fuerzas Militares

El teniente coronel Rafael Granados Rueda, reconocido por liderar operaciones contra organizaciones criminales en el suroccidente del país, fue atacado por sicarios cuando se dirigía a su vivienda. Las autoridades abrieron una investigación para dar con los responsables.

Un ataque armado en una zona residencial de Popayán dejó sin vida al teniente coronel Rafael Granados Rueda, oficial de la Brigada contra el Narcotráfico No. 3 y una de las figuras operativas más relevantes en la lucha contra economías ilegales en el Cauca. Según información preliminar, el oficial fue sorprendido por dos hombres armados mientras se desplazaba desde el cantón militar hacia las casas fiscales del barrio Champagnat, en la tarde del 27 de noviembre.

Herido de gravedad, Granados Rueda fue trasladado a un centro asistencial, donde falleció debido a la severidad de las lesiones. Su muerte generó un fuerte impacto en las Fuerzas Militares y en la opinión pública, dada su trayectoria como jefe del Departamento de Operaciones, desde donde dirigía acciones contra estructuras narcoterroristas y redes criminales que operan en el suroccidente del país.

El comandante de la Tercera División del Ejército, general Hernando Africano, rechazó categóricamente el ataque y aseguró que el caso ya fue puesto en manos de la Fiscalía. A su vez, el comandante de las Fuerzas Militares, almirante Francisco Cubides, condenó lo ocurrido, subrayando que el oficial fue asesinado en un escenario de total indefensión. “Es un acto criminal que ofende a la Nación y atenta contra quienes consagran su vida a la defensa de Colombia”, afirmó.

Granados Rueda, nacido en 1985, era esposo y padre de un menor. Su trabajo lo había posicionado como una pieza clave en la ofensiva militar contra grupos armados que disputan el control del territorio en Cauca, una de las zonas más complejas del país por presencia de narcotráfico y violencia.

La Policía Judicial, en articulación con unidades del Ejército, inició las pesquisas para identificar a los autores materiales e intelectuales del homicidio, que se convirtió en uno de los golpes más dolorosos para la institución en los últimos meses.