El comercio en Colombia evidencia una recuperación sólida en sus ventas, tanto físicas como digitales, pero enfrenta el reto de revertir la caída del empleo temporal para sostener su crecimiento sin perder capacidad laboral.
El comercio minorista en Colombia cerró el mes de marzo de 2025 con un crecimiento significativo en sus ventas reales, alcanzando un aumento del 12,7 % frente al mismo mes del año anterior, según reveló la más reciente Encuesta Mensual de Comercio del Dane.
Esta recuperación es aún más notoria si se excluye el comercio de combustibles, pues la variación positiva en ese caso fue del 14,7 %, reflejando un impulso relevante en la dinámica del consumo en el país.
Las líneas de mercancía que más contribuyeron a este crecimiento fueron las ventas de vehículos automotores y motocicletas de uso doméstico, así como los equipos de informática y telecomunicaciones para el hogar.
Estos sectores aportaron en conjunto 6,6 puntos porcentuales a la variación total registrada en marzo.
Sin embargo, no todo el panorama es positivo: dos líneas de mercancía mostraron variaciones negativas, siendo la más destacada la de bebidas no alcohólicas, que restó 0,1 puntos porcentuales a la cifra global.
En lo corrido del primer trimestre del año, las ventas del comercio minorista crecieron un 10,1 % frente al mismo periodo de 2024.
En ese lapso, se repitió el patrón de crecimiento liderado por vehículos, tecnología y telecomunicaciones.
A nivel regional, Bogotá D.C. y Antioquia encabezaron las contribuciones positivas, con aportes de 6,1 y 2,6 puntos porcentuales, respectivamente, al total nacional excluyendo el comercio de combustibles.
A pesar del buen desempeño en ventas, el empleo en el sector mostró un retroceso.
En marzo de 2025, el personal ocupado disminuyó un 0,9 % frente al mismo mes del año anterior. Esta caída se explicó principalmente por una reducción del 3,7 % en el personal temporal directo, del 7,1 % en trabajadores contratados a través de empresas de servicios temporales y de un 10,7 % en aprendices.
En contraste, el personal permanente aumentó ligeramente, con una variación positiva del 1,0 %. Para el primer trimestre de 2025, la disminución en el empleo fue del 1,1 %, con una contracción generalizada en todas las modalidades de contratación, salvo en la planta permanente.
Uno de los sectores que mostró mayor dinamismo fue el comercio electrónico. Las ventas realizadas a través de canales digitales crecieron un 23,9 % en marzo, en comparación con el mismo mes del año anterior, superando ampliamente el crecimiento general del comercio minorista.
Aunque estas transacciones solo representaron el 2,3 % del total de ventas del sector, la cifra es superior al 2,1 % registrado un año atrás, lo que indica una tendencia creciente.
En el acumulado del primer trimestre, el comercio electrónico registró un incremento del 18,2 %, mientras que el comercio minorista total creció 8,5 %.
En cuanto a las grandes superficies, los hipermercados y grandes almacenes reportaron ventas nominales por $10,5 billones en marzo de 2025, lo que representó un aumento del 9,8 % frente a marzo del año anterior.
Para el primer trimestre, las ventas en este canal ascendieron a $30 billones, con un crecimiento del 9,3 %. Sin embargo, el empleo también se contrajo en estos establecimientos: el personal ocupado alcanzó las 218.006 personas, una disminución del 0,9 % en marzo, y del 1,0 % en el trimestre.
Por su parte, el comercio al por mayor también presentó indicadores favorables en términos económicos. El margen comercial –diferencia entre ventas y costo de la mercancía vendida– creció un 13,5 % en marzo frente al año anterior, con un fuerte impulso en sectores como alimentos y bebidas, maquinaria y productos farmacéuticos.
No obstante, el empleo en este segmento permaneció prácticamente estancado, con un crecimiento marginal del 0,4 %, gracias al aporte del sector farmacéutico, mientras que otros subsectores como maquinaria y equipos registraron caídas.