¡Vuelve y juega! Daniel Quintero habría firmado contrato con la Universidad Nacional para favorecer campañas políticas en Medellín

La Procuraduría busca establecer si el convenio fue utilizado para fortalecer las campañas de algunos candidatos que aspiraron a la Alcaldía y el Concejo en las elecciones del pasado 29 de octubre.

La Procuraduría inició una inspección disciplinaria en las oficinas de la Secretaría de Comunicaciones de la Alcaldía de Medellín en el marco de una investigación adelantada por presuntas irregularidades en la firma y ejecución de un contrato suscrito en febrero de 2023, durante el mandato de Daniel Quintero Calle, con la Universidad Nacional, por un poco más de nueve mil millones de pesos para apoyar estrategias de comunicación de la ciudad.

En la diligencia participan funcionarios de la Tercera Delegada para la Contratación Estatal y de la Dirección Nacional de Investigaciones Especiales de la Procuraduría, con el propósito de buscar, recolectar y preservar pruebas dentro del proceso disciplinario que se adelanta.

Por esos hechos, el órgano de control investiga a la entonces secretaria de Comunicaciones de la Alcaldía para la fecha en que ocurrieron los hechos, Mónica María Orrego López, así como al exjefe de esa misma dependencia, Juan José Aux Trujillo, y el profesional universitario, Juan Carlos Gómez Henao.

Para favorecer campañas

El órgano de control investiga si el contrato firmado fue utilizado para favorecer intereses particulares, concretamente las campañas de algunos candidatos que aspiraron a la Alcaldía de Medellín y el Concejo de la ciudad durante las elecciones del pasado 29 de octubre.

También se busca establecer si la administración de Daniel Quintero Calle habría desconocido las modalidades de selección previstas en la ley, pues contrató de manera directa a la universidad mediante la firma de un convenio interadministrativo, la cual es una figura excepcional para la suscripción de compromisos de esa naturaleza. 

En el proceso disciplinario, el Ministerio Público también busca establecer si la entidad académica contaba con la capacidad suficiente para ejecutar los trabajos, pues a noviembre pasado había tenido que suscribir 280 contratos de prestación de servicios para efectuar las actividades que le correspondían.