El debate sobre el incremento salarial se intensifica antes de la negociación oficial. El exministro Ángel Custodio Cabrera advirtió que la decisión podría ser más política que técnica y tendría fuertes repercusiones económicas.
El exministro de Trabajo Ángel Custodio Cabrera advirtió que la definición del ajuste salarial podría responder a intereses políticos más que a criterios técnicos. “El presidente dijo que iba a colocar el incremento salarial, el más grande de la historia”, afirmó, señalando que en los últimos años no se ha logrado concertar en la mesa de políticas salariales, lo que anticipa una nueva decisión por decreto.
Aunque la decisión se tomará en diciembre, el Ejecutivo estaría dispuesto a decretar un aumento del 11 %, el último del mandato de Gustavo Petro, que llevaría la cifra de $1.423.500 a $1.580.085 (sin auxilio de transporte).
Según Cabrera, el gobierno busca dejar una huella política con un aumento histórico, en un contexto en el que la inflación anual en agosto se ubicó en 5,1 % y se proyecta en 6 % para 2026. Frente a un posible incremento del 11 %, el exfuncionario alertó. “Dos o tres puntos porcentuales más es terrible en las actuales circunstancias. Pero el 10 % sería una locura, aunque como están, no me sorprendería”.
El también exdirector por Colombia del Banco Centroamericano de Integración Económica advirtió que un aumento de esa magnitud, superior a los indicadores de inflación y productividad, podría traer efectos adversos en medio de la desaceleración económica y presiones inflacionarias.