Billy Escobar explicó que la entidad está facultada únicamente para ejecutar acciones tendientes al mejoramiento de los indicadores de productividad y el cumplimiento de las obligaciones laborales. La medida puede apelarse.
A través de un comunicado de prensa, la Superintendencia de Sociedades informó la decisión de llevar a cabo una supervisión en grado de control a la sociedad Monómeros Colombo Venezolanos S.A..
La entidad aclaró también que estas actuaciones administrativas de carácter societario “se adoptan con fin preventivo, a efectos de preservar la empresa como unidad productiva y fuente generadora de empleo, ante la situación financiera que presenta oportunidades de mejora en cuanto a sus fuentes de financiación, disminución de ingresos, flujo de caja, entre otros”.
El boletín explica que la supervisión que ejerce al más alto nivel permitido por la ley no supone una intervención, ni tampoco confiere a la Superintendencia facultades para entrar a coadministrar. Es decir que, Monómeros sigue teniendo el control de las operaciones mercantiles.
Sobre este tema, precisa la nota de prensa que “el control se ejerce en los términos del artículo 85 de la Ley 222de 1995 sobre la sociedad exclusivamente, sin comprender ni recaer en sus accionistas, que son sociedades extranjeras, que conservan sus derechos de propiedad y disposición sobre sus acciones. Las cuales, ante una eventual venta o acuerdo que afecte la participación de la sociedad en el mercado de los fertilizantes deberán cumplir con el régimen de integraciones empresariales”.
Yendo un poco más allá, sostienen que la supervisión en comento habilita a la Superintendencia de Sociedades para llevar a cabo acciones tendientes al mejoramiento de los indicadores de rentabilidad y operativos de la empresa.
“Haremos un monitoreo que implica recomendar planes de mejoramiento, reformas estatutarias o capitalizaciones que permita que la empresa salga adelante. Está bien dado a la correcta financiación, a la disminución de los ingresos, a verificar que no suceda eso, entre otros aspectos que tienen que ver con que la empresa sea viable y sostenible”, comentó Billy escobar, superintendente de Sociedades.
Finalmente, Escobar aseguró que la Superintendencia venía llevando a cabo estas acciones de forma trimestral, sin embargo, la situación actual hace imperativa una presencia y control más estricto y permanente. “La decisión de someter a control es susceptible de los recursos de reposición y de apelación”, puntualizó.
