En el foro Salud en Colombia, la senadora y precandidata presidencial presentó un paquete de propuestas que incluyen un modelo mixto, uso de inteligencia artificial, fortalecimiento de la infraestructura rural y garantías laborales para el personal médico, en contraposición al modelo gubernamental.
La senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal lanzó una de sus intervenciones más contundentes en materia de salud durante el foro Salud en Colombia, organizado por el Nuevo Liberalismo. En medio de la crisis que atraviesa el sistema y con la mirada puesta en las elecciones de 2026, Cabal presentó un paquete de propuestas orientadas a “rescatar lo que queda del sistema y blindarlo contra la politiquería”.
Desde el inicio, su discurso no pasó desapercibido: “Frente a Petro, que como he dicho, es peor que el COVID, debemos lograr un Acuerdo sobre lo Fundamental”, afirmó, agradeciendo al senador Juan Manuel Galán por abrir el espacio de debate y reconociendo a su partido por lo que calificó como “una oposición responsable frente a proyectos nefastos que ponen en riesgo la vida de los colombianos”.
Radiografía del colapso: cifras que alarman
Cabal presentó un panorama crítico del sistema de salud, sustentado en cifras oficiales. Según la senadora, las deudas del sistema con las EPS alcanzan los 32,9 billones de pesos, un aumento de 7,9 billones en el último año. La industria farmacéutica no escapa a la crisis: mantiene una cartera de 4,3 billones, gran parte de ella vencida.
“Estamos ante un sistema que, pese a tener el 99 % de la población afiliada, no logra garantizar acceso efectivo, especialmente en las zonas rurales. Hoy más de 1,6 millones de PQR reflejan las fallas: largas esperas, rechazos y el ‘paseo de la muerte’ que sigue costando vidas”, advirtió. Además, denunció la precarización laboral del personal de salud, “profesionales sin estabilidad ni condiciones dignas, tratados como si fueran de segunda categoría”.
Las propuestas: un modelo mixto, tecnología y control riguroso
La precandidata del Centro Democrático se comprometió a reconstruir el sistema sobre bases técnicas y no ideológicas. Su apuesta se centra en mantener un modelo mixto, donde la competencia entre prestadores mejore la calidad del servicio. “La salud es un derecho, pero eso no significa que no pueda haber competencia. Al contrario, la competencia obliga a servir mejor”, señaló.
Entre sus principales propuestas destacan:
- Fondo de Garantías para la continuidad del servicio: un mecanismo que asegure la atención médica incluso en procesos de liquidación de EPS.
- Auditorías integrales y rendición de cuentas: “Nunca más EPS intervenidas por afán politiquero”, enfatizó.
- UPC diferencial basada en resultados: incentivos para EPS eficientes y sanciones para las que presenten fallas.
- Tecnología e inteligencia artificial para fortalecer la telemedicina, detectar riesgos en tiempo real y optimizar recursos.
- Interoperabilidad de historias clínicas a nivel nacional para garantizar continuidad en la atención.
- Infraestructura hospitalaria rural blindada contra la corrupción, con incentivos para que EPS e IPS operen en territorios apartados.
- Programas específicos para enfermedades de alto costo o raras, garantizando equidad en el acceso a tratamientos.
- Dignificación del personal de salud, con estabilidad laboral y formación continua.
Un mensaje político y electoral
Más allá de las propuestas técnicas, Cabal envió un mensaje político claro: su plan de salud es también un eje central de su campaña presidencial. Criticó duramente el modelo que impulsa el Gobierno, al que acusó de “querer estatizar la salud para convertirla en botín electoral” y de “abandonar a los pacientes a su suerte”.



