La líder opositora reveló que actualmente hay más de 800 grupos ilegales que ejercen control parcial o total en al menos 400 municipios colombianos. Además, acusó al presidente de crear «fantasías» para distraer los verdaderos problemas del país.
En una encendida intervención durante la plenaria del Senado, la senadora María Fernanda Cabal lanzó una dura advertencia sobre la crisis de seguridad que atraviesa Colombia bajo el mandato de Gustavo Petro. Con cifras alarmantes sobre el control de grupos ilegales en cientos de municipios y un panorama desolador en regiones como Arauca, Cabal acusó al gobierno del «cambio» de estar llevando al país hacia el colapso, debilitando las instituciones de seguridad y comparando a Petro con el régimen de Nicolás Maduro.
Según Cabal, actualmente hay más de 800 grupos ilegales que ejercen control parcial o total en al menos 400 municipios del territorio nacional. Particularmente, denunció la situación crítica en Arauca, donde afirmó que «500 muertos en Arauca, y 600 muertos en Tame» son evidencia del deterioro de la seguridad en esa zona fronteriza, además del confinamiento al que está siendo sometida la población debido a la presencia de estos grupos armados.
En este contexto, la congresista cuestionó los resultados de las políticas de seguridad del gobierno Petro y lanzó una pregunta a los demás senadores: «¿Hacia dónde nos quiere llevar el gobierno del cambio?», poniendo en duda las verdaderas intenciones del Ejecutivo al respecto.
Crítica a la denuncia del software israelí
Uno de los temas más polémicos de su intervención fue su dura crítica a las recientes acusaciones del presidente Petro sobre la supuesta compra de un software de espionaje israelí por parte de la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol). Petro afirmó que, durante el gobierno anterior, la Dipol habría pagado 11 millones de dólares en efectivo y trasladado estos fondos clandestinamente a Tel Aviv. Sin embargo, Cabal señaló que no existen pruebas claras que respalden esta denuncia y acusó al presidente de crear «fantasías» para distraer de los verdaderos problemas del país.
«La más reciente fantasía de Petro ha sido denunciar la compra de un supuesto software israelí por parte de la Dipol, sin pruebas claras y acusando a generales que prestaron su servicio a la policía en el gobierno pasado», expresó la senadora. Añadió que este tipo de acusaciones sin fundamento, basadas en un informe de la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF), no solo dañan la imagen de las instituciones, sino que también afectan la relación de Colombia con organismos internacionales clave, como el Egmont Group, encargado de coordinar la lucha contra el crimen organizado y el lavado de dinero a nivel global.
«Petro se basó en un informe de la UIAF que violó las normas de confidencialidad internacional, afectando la confianza del Egmont Group, al que Colombia pertenece desde el año 2000», explicó la congresista, advirtiendo que esta situación compromete la capacidad del país para recibir información crucial en la lucha contra el crimen organizado y el terrorismo.
Debilitamiento de la seguridad
Cabal también alertó sobre lo que consideró una intención deliberada del gobierno Petro de desmantelar los sistemas de seguridad e inteligencia de Colombia. Según la senadora, el presidente ha tomado decisiones que ponen en riesgo la capacidad del país para defenderse de amenazas internas y externas, al entregar la inteligencia policial a personas afines a su ideología política.
«Todo esto trae como consecuencia desarmar al país y debilitar sus sistemas de seguridad, poniendo en riesgo la inteligencia policial», afirmó. Para Cabal, estas acciones buscan consolidar un gobierno dominado por antiguos guerrilleros del M-19, el grupo armado del que Petro fue miembro en su juventud. «Hoy nos gobierna el M-19», sentenció, refiriéndose al supuesto control que estos antiguos insurgentes tendrían sobre el poder en Colombia.
«Un paraíso criminal»
Uno de los momentos más demoledores de su intervención fue cuando la senadora lamentó el destino de las víctimas del conflicto armado, señalando que muchas nunca recibieron justicia ni reparación por parte del Estado. Cabal denunció la «impunidad» que ha caracterizado los procesos de paz y reconciliación en Colombia, y afirmó que el país está en camino de convertirse en un «paraíso criminal» bajo el gobierno actual.
«Quedar desprotegidos, presidente, es convertirnos en un paraíso criminal. De pronto esa es la intención del tal gobierno del cambio», aseguró, sugiriendo que las políticas de Petro podrían estar facilitando el crecimiento de actividades ilícitas y la consolidación de territorios controlados por actores armados ilegales.
La senadora concluyó con una frase contundente que resonó en el recinto del Senado: «El cambio no fue nada distinto a un suicidio de Colombia», dejando en claro su postura de rechazo total a las políticas del gobierno Petro y advirtiendo sobre las graves consecuencias que, según ella, estas están generando para la estabilidad y la seguridad del país.