Según trascendió, las publicaciones se relacionan con la reciente reunión de dos expresidentes y habrían motivado la intervención del órgano de control. La Sala Disciplinaria ordenó pruebas para esclarecer la conducta y verificar si el ministro actuó bajo alguna causal de exclusión de responsabilidad.
La Procuraduría General de la Nación activó una indagación previa para revisar el contenido y la intención de varias publicaciones hechas desde la cuenta del ministro de Trabajo, Antonio Sanguino Páez, en la red social X. Según el comunicado oficial, el caso se abre porque las intervenciones en esa plataforma podrían constituir una actuación disciplinariamente relevante.
En ese sentido, la entidad señaló que el proceso se origina por “presuntas irregularidades en que pudo incurrir con algunas publicaciones hechas en redes sociales”, expresión que marca el punto de partida de la verificación preliminar.
El organismo de control explicó que, durante la revisión inicial del perfil del ministro, se detectaron mensajes relacionados con la reciente reunión de dos expresidentes, lo que plantea interrogantes sobre el tono y el alcance institucional de esas intervenciones. Yendo más allá, la Sala Disciplinaria de Instrucción indicó que en la cuenta se encontraron “contenidos con comentarios descalificadores a propósito de la reunión de dos expresidentes”, motivo por el cual será necesario determinar si dichos mensajes se emitieron en condición personal o si pueden interpretarse como expresión funcional derivada del cargo.
La indagación busca establecer hechos verificables antes de adoptar una decisión sobre la pertinencia de abrir investigación formal. El comunicado precisa que, con esta actuación preliminar, el órgano de control pretende “determinar la ocurrencia de la conducta”, lo que obliga a reconstruir el contexto de publicación, validar la titularidad del contenido y confirmar la autenticidad de los mensajes.
Para ello, la entidad decretó pruebas técnicas y solicitudes de información dirigidas a la cartera laboral. Otro elemento que será objeto de análisis es la eventual existencia de un eximente disciplinario. Así las cosas, en esta etapa se deberá “definir si el disciplinable actuó o no al amparo de una causal de exclusión de responsabilidad”, examen que incluye revisar la naturaleza personal o institucional de la cuenta, el grado de intervención directa del ministro y la posible protección constitucional de sus expresiones.
Finalmente, aunque la entidad no reveló los textos completos, dejó claro que el análisis preliminar permitirá establecer si los mensajes superan el umbral permitido para los altos funcionarios en escenarios digitales y, a partir de esa valoración dependerá si el caso avanza hacia una indagación formal o si los hechos se descartan por carecer de mérito disciplinario.
