De acuerdo con varias personalidades de la opinión y la cosa pública, el presidente está fundamentando falsamente entre sus seguidores la teoría de que todas las instituciones del Estado hacen parte de un complot para sacarlo del cargo antes de que termine su mandato.
Durante las manifestaciones convocadas por el presidente Gustavo Petro y dinamizadas en todo el territorio nacional por la Federación Colombiana de Educadores (Fecode), un acto atrozmente simbólico hizo temer lo peor. Esta acción, no es una más de las que acostumbra a reseñar en la prensa, por ejemplo, el Día del Trabajador.
La imagen de un grupo de hombres abalanzándose sobre la entrada del parqueadero del Palacio de Justicia, es sin dudas el punto más alto de hostilidad al que han llegado las manifestaciones propiciadas, incluso, financiadas por el Gobierno Nacional, desde que Gustavo Petro está en la Casa de Nariño.
Muy pocas personas, además de los adeptos a la causa petristas y el destemplado Luis Almagro, han salido públicamente a defender la protesta, que se supo, tenía desde un principio programada su finalización donde sesionaba la Sala Plena de la Corte Suprema de justicia en su segundo intento de elegir una de las ternadas por el presidente para el cargo de fiscal.
Petro es un incendiario
Katherine Juvinao Clavijo, representante a la Cámara por el Partido Verde y que respaldó a Petro en las pasadas elecciones presidenciales, envió un duro mensaje a través de su cuenta en la red social X, donde advierte sobre lo peligroso que está resultando, dados los hechos, el discurso manejado por el Jefe de Estado en torno a una intención manifiesta de sacarlo de su cargo por la vía judicial, lo que a sus ojos, es un sofisma para encubrir el trasfondo del asunto: presunta financiación ilegal de su campaña.
“El presidente @petrogustavo está abriendo caminos muy peligrosos. Empezó diciendo que la ruptura y el golpe blando venían de la Fiscalía por investigar sus cuentas de campaña. Ahora dice que estamos en ‘lawfare’ y que ‘la justicia’ va tras el hundimiento de las reformas y el gobierno”, señaló la congresista.
Por su parte, Bruce MacMaster, presidente de la Asociación Nacional de Industriales (Andi), dejó ver su malestar por el incidente ocurrido a las afueras del Palacio de Justicia y que según él, debe ser rechazado de plano por la sociedad, porque puede ser el inicio de la destrucción total de la independencia de poderes y el deber de cooperación armónica de los que habla la Constitución Política de 1991.
“Es una situación no solo lamentable, sino totalmente inaceptable, porque es el reflejo de un grupo de la sociedad que cree que puede imponer sus intereses y sus decisiones por la fuerza. Y puede imponerle a la Corte Suprema de Justicia que tome una decisión en un sentido o en otro. Ese es un hecho gravísimo con la democracia y no lo podemos permitir, porque si lo permitimos vendrán otros hechos peores, es el momento de hacer un alto en Camino, de reflexionar y de decidir a qué estamos dispuestos y a qué no. Me atrevo a decir que una gran mayoría de colombianos hoy en día no estamos dispuestos a sacrificar la democracia”, dijo el dirigente gremial en entrevista con la Revista Semana.
Sobre este asunto en concreto, la también activista, fue más allá e insinuó que esa parece ser la estrategia de Petro: crear en el ideario colectivo la sensación que que todas las instituciones del Estado conspiran en su contra por su condición de progresista y eventualmente justificar acciones similares o mucho más violentas contras las instituciones a las que parece haberles declarado la guerra.
“¿Está ambientando el presidente una guerra contra las Cortes para el momento en que estas evalúen la exequibilidad de las reformas, por ejemplo: la de salud? ¿Cree el presidente que por ser el primer presidente de izquierda entonces el sistema de frenos y contrapesos no aplica para él, y que cualquier investigación/control judicial equivaldrá a ‘lawfare’ y a persecución jurídica?”, cuestionó Juvinao en el extenso escrito.
Petro es un irresponsable
Los interrogantes de la congresista son relevantes, porque los extensos discursos, que han dicho algunos analistas, son una mezcla de populismo y verdades a medias, vienen desde hace tiempo direccionados hacia personas e instituciones que tienen la facultad de frenar el ‘tranvía del cambio’.
Habida cuenta de lo sucedido, los industriales solicitan a todos los actores políticos, sociales y económicos mantener la calma en estos convulsos momentos, porque sumir al estado en una crisis democrática podría dar al traste como 200 años de historia republicana.
“Yo no puedo interpretar al presidente, pero de lo que si estoy seguro es que no podemos dar pie a ningún hecho de ruptura institucional. Los líderes políticos, los líderes de este país debemos tener muchísimo cuidado, porque la democracia se demora muchos años en construir, pero se rompe con tres hechos violentos. Es el momento de darnos cuenta de la responsabilidad que tenemos”, apremió MacMaster.
En ese mismo sentido son los reclamos hechos por la representante del Verde, quien ha sido cuestionada duramente por sus posiciones en contra del Reforma a la Salud y otros postulados del Gobierno Nacional: le recuerda al mandatario que en los sistemas democráticos las sanciones de tipo penal no las determina el ente acusador a voluntad, sino que son proferidas por un juez.
“En el caso de la Fiscalía creo que la mayoría podemos estar de acuerdo en sus actuaciones politizadas y selectivas, pero por fortuna la Fiscalía nunca tiene la última palabra pues los que fallan son los jueces. Hablar de lawfare implica que los jueces y la justicia son los que conspiran para derrocar al gobierno”, precisó Kathy Juvinao.
A renglón seguido, acusa al jefe de Estado de haber pasado casi la mitad de su mandato buscando enemigos y culpables para los más bien regulares resultados presentados por su equipo de gobierno, además, deja entrever que las manifestaciones podrían escalar en intensidad.
“Unas declaraciones peligrosas e irresponsables por parte del presidente. ¿Hasta dónde vamos a llegar con estas teorías conspirativas? ¿De verdad quieren manipular así al pueblo en los dos años y medio que quedan de gobierno? ¿Cuándo van a concentrarse en gobernar, en hacer las cosas bien, en darle resultados a la ciudadanía que está esperando las acciones de gobierno para mejor sus vidas en lo concreto?”, se lee en uno de los apartes post en X de la representante a la cámara por el Partido Alianza Verde.
Finalmente, ambos personajes, parados tal vez en orillas distintas, coinciden en que en estos tiempos más bien difíciles, es oportuno que quienes protagonizan las manifestaciones, se movilicen atendiendo los fines constitucionales de esa garantía y sin poner en peligro la institucionalidad.
“El único fin razonable debe ser el que todos rechacemos las presiones. A todas las ramas del poder público hay que exigirles que cumplan con sus obligaciones, pero definitivamente no puede ser por la vía de las presiones y mucho menos presiones violentas”, puntualizó Bruce MacMaster.