Petro admite aumento de cultivos de coca en Colombia

El presidente reconoció que las hectáreas sembradas con coca crecieron 3 % en 2024, antes de la publicación oficial del informe de la ONU. Intentó justificar las cifras señalando que parte de los cultivos están abandonados o en transición, en medio de la crisis con EE. UU. por su inclusión en la Lista Clinton.

El presidente Gustavo Petro terminó por reconocer el aumento de los cultivos de coca en el país, al anticiparse al informe anual del Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (Simci) de 2024. Desde Medio Oriente, y a través de su cuenta de X, el mandatario confirmó que las hectáreas sembradas crecieron un 3 %, hasta alcanzar las 262.000.

Petro aseguró que el informe aún no se ha hecho público porque se busca evitar “el error de 2023”, cuando, según dijo, se incluyeron datos de productividad por zonas sin diferenciar los enclaves activos de cocaína de los territorios ya abandonados. Sin embargo, con esta declaración terminó reconociendo un nuevo incremento en los cultivos ilícitos, luego del fuerte repunte del año anterior.

En 2023, la producción potencial de cocaína había crecido 53 %, con un salto de 10 % en las hectáreas cultivadas frente a 2022 (de 230.000 a 253.000). La cifra actual, de 262.000 hectáreas, refleja que el fenómeno continúa en expansión, aunque a un ritmo más moderado.

El mandatario intentó matizar las cifras asegurando que, de las 262.000 hectáreas detectadas, unas 80.000 estarían abandonadas desde hace más de tres años y 22.000 se encuentran en proceso de sustitución. Además, atribuyó el mantenimiento de los enclaves cocaleros al aumento del consumo de cocaína en Europa, el Cono Sur y Australia, mientras que, según él, el mercado de Estados Unidos habría tocado techo por el auge del fentanilo.

El reconocimiento de Petro llega en un momento delicado cuando Colombia atraviesa una crisis diplomática con Washington tras la inclusión del jefe de Estado y algunos de sus allegados en la Lista Clinton, medida que se justificó precisamente en los escasos resultados del gobierno en la lucha contra el narcotráfico.