Los empleados afectados por el cierre de una planta extractora de aceite, marcharon por las calles de Tibú, Norte de Santander, para denunciar las constantes extorsiones que tienen en jaque a los empresarios del sector, poniendo en riesgo miles de puestos de trabajo.
La inseguridad es un problema generalizado en todo el país. Asomarse a la prensa es darse de cara con la dura y difícil situación que se vive en varias zonas del país donde el control lo ejercen los grupos armados ilegales.
Una de esas regiones históricamente afectadas por la violencia y el accionar de estructuras criminales, es el Catatumbo. La agenda noticiosa informa al menos una vez a la semana la ocurrencia de algún atentado, hostigamiento o secuestro, muchas veces con saldos fatales.
Aunque el foco de las noticias y acciones del gobierno está en la población civil, el tejido empresarial también vine siendo víctima de estas organizaciones, incluso, una planta extractora de aceite cesó actividades por cuenta de las constantes extorsiones y presiones de actores armados.
En atención al impacto negativo que esta medida desesperada produce en más de 7000 trabajadores, varios gremios del Norte de Santander marcharon este miércoles 24 de julio en el municipio de Tibú.
“Queremos seguir trabajando”
“Las presiones que hemos venido sufriendo los productores, los transportadores, las plantas extractoras y en general todos los habitantes de la región que ejercen una actividad productiva (incluso, hasta las más pequeñas actividades de subsistencia, como los mototaxis, las peluquerías, las tiendas, los comercios, etc), comprometen seriamente la estabilidad productiva de la región y afectan seriamente los ingresos y la calidad de vida de miles de familias de la región”, manifestaron los organizadores de la marcha pacífica a través de una carta difundida a los medios de comunicación.
Asimismo, señalaron que la situación actual la vivieron en el pasado con una arremetida similar que deterioró por completo la economía de la región, al tiempo que solicitan garantías para seguir trabajando.
“De manera pacífica y solidaria, manifestemos al Gobierno Nacional y a toda la Sociedad Colombiana que los pequeños y medianos productores de todos los sectores del Catatumbo, queremos seguir trabajando unidos para el sustento de nuestras familias y para jalonar el desarrollo de la región. Queremos hacerlo sin las presiones que hoy amenazan nuestro progreso; en condiciones de paz, convivencia y seguridad”, se lee en la misiva.
Gremios respaldan la marcha
José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), publicó en su cuenta de X un mensaje de solidaridad para con los manifestantes y un duro cuestionamiento al Ejército de Liberación Nacional (ELN), organización criminal que se encuentra negociando la paz con el Estado colombiano.
“Cansados de la presión armada los pequeños palmeros y sus trabajadores, ante el cierre de la extractora de Tibú por la permanente extorsión del ELN, salieron a marchar. “Juntos podemos construir un Catatumbo mejor, lleno de paz y progreso””, posteó el líder ganadero, quien constantemente denuncia casos similares en el gremio que representa.
También unió su voz a los marchantes la Asociación Nacional de Industriales (Andi) a través de su seccional en Norte de Santander. La organización denuncia a través de un comunicado el impacto negativo de la actividad criminal en la región y la falta de control por parte del Estado.
“Estos grupos, mediante diferentes modalidades de extorsión, están controlando el desarrollo de las actividades económicas en la región. Las acciones violentas de los mismos ponen en riesgo el trabajo de más de 15.000 personas en el departamento, afectando distintos sectores y encadenamientos productivos. Reiteramos nuestro llamado al gobierno nacional y a las autoridades competentes para que tomen medidas urgentes y efectivas que garanticen la seguridad y la tranquilidad de los habitantes de Norte de Santander”, se lee en uno de los apartes de la nota de prensa.
Finalmente, la Promotora Nortesantandereana de Infraestructura para la Competitividad (Pronorco) y la Federación Colombiana de Transportadores de Carga por Carretera (Colfecar) solicitaron mediante carta conjunta protección real y garantías para los empresarios de la región.
“Hacemos un llamado urgente a las autoridades competentes para que tomen medidas efectivas y contundentes que garanticen la seguridad y tranquilidad necesarias para la continuidad de las actividades productivas en el Catatumbo. Es imperativo proteger el tejido empresarial que tanto contribuye al desarrollo sostenible y a la generación de empleo en nuestro país”, puntualizan las organizaciones gremiales.
