Trascendió a la opinión pública que, luego de la polémica entre el presidente de Colpensiones y la senadora Paloma Valencia, el Ministerio de Educación expidió una resolución dando validez al título de posgrado en cuestión. Piden que se investigue si hubo tráfico de influencias.
Jaime Dussán, presidente de Colpensiones se ha visto envuelto en una polémica debido a las dudas que existían sobre la validez de su título de maestría en Dirección de Relaciones Públicas y Gabinetes de Comunicación, obtenido en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).
El hecho tiene connotaciones de relevancia, porque según el manual de funciones de Colpensiones y el Decreto 1083 de 2015, para ocupar ese cargo, es requisito obligatorio la acreditación de un título de posgrado o la convalidación de este por el Ministerio de Educación Nacional si fue obtenido en el extranjero.
Desde el año pasado, Paloma Valencia, senadora por el Partido el Centro Democrático, ha hecho énfasis en la necesidad de verificar si Dussán cumplía este requisito al momento de posesionarse en el cargo que actualmente ostenta, poniendo en duda la legalidad del nombramiento.
La discusión escaló hasta trascender a la opinión pública, cuando Valencia denunció que el título de posgrado referenciado por Dussán en su hoja de vida no había sido convalidado en los tiempos que la ley establece, es decir, dos años posteriores a su posesión, tiempo que feneció el pasado 2 de diciembre de 2024.
“Jaime Dussán presentó en su hoja de vida que cuenta con una maestría en el exterior. Sin embargo, los posgrados en el exterior NO son válidos si no se encuentran convalidados ante el Ministerio de Educación. El decreto 1083 de 2015 establece que luego de posesionado tiene hasta dos años para presentar la homologación de sus títulos”, explicó en su momento la senadora por el partido Centro Democrático.
En esa oportunidad, Valencia, quien estaba pendiente de un fallo judicial, señaló que la junta directiva de Colpensiones estaba «validando su permanencia ilegal» en el cargo, al tiempo que exigió la revocatoria del nombramiento, argumentando que las decisiones tomadas por Dussán podrían eventualmente estar viciadas.
https://twitter.com/PalomaValenciaL/status/1888910020907073550
Las sospechas de Valencia fueron confirmadas por el mismo Jaime Dussán, quien luego de ser vencido en juicio, informó a la congresista de oposición que su título no había sido convalidado aún, puesto que el proceso administrativo en el Ministerio de Educación seguía su curso. «La convalidación se encuentra en trámite en el Ministerio de Educación Nacional, y solo cuento con la fecha de radicación de la solicitud», afirmó el presidente de Colpensiones en la rogada respuesta.
La homologación exprés
Una semana después de este incidente, concretamente el pasado jueves (27 de febrero), trascendió a la opinión pública que el Ministerio de Educación había expedido una resolución homologando el título de posgrado de Dussán. Este hecho, que se dio tras años de supuesto retraso en el trámite, según el propio protagonista, desató una ola de críticas por la rapidez del proceso.
Más de un internauta destacó que si bien en Colombia la convalidación de títulos extranjeros puede tomar entre 30 y 180 días de acuerdo con la normatividad vigente y los procesos internos del Ministerio de Educación, hay casos donde el trámite se extiende hasta año y medio.
Sebastián Nohra, periodista de Blu Radio y El Colombiano, se refirió al asunto, cuestionando la celeridad con la que entre funcionarios del gobierno Petro ‘se cubren las espaldas’.
«Homologar títulos en el Ministerio de Educación es tal vez el trámite más absurdo de nuestro Estado. A algunos les toma año y medio. Jaime Dussán se vio en aprietos, levantó un teléfono y se lo homologaron. Comportamiento de casta pura. De gente que se sabe intocable», escribió el periodista en su cuenta en X.
Este incidente, nombrado ya como la ‘homologación exprés de Dussán’, pone de presente que la celeridad en los casi siempre engorrosos trámites y procesos administrativos están al alcance de uno pocos: la élite política.
Finalmente, es importante resaltar que, como ha dicho Paloma Valencia, incluso con la homologación en mano, el nombramiento estaría viciado porque incumplió el plazo legal establecido para la acreditación del título. Igualmente, insistir en que debería investigarse por posible tráfico de influencias.