La líder opositora arremetió contra la persecución política que, según ella, enfrenta la familia Uribe y criticó las políticas actuales que, en su opinión, legitiman la criminalidad y la economía ilegal en varias regiones del país.
En una apasionada intervención en la plenaria del Senado, la senadora María Fernanda Cabal reafirmó su respaldo al expresidente Álvaro Uribe Vélez, destacando su papel en la recuperación de la seguridad y la estabilidad del país durante su gobierno (2002-2010).
La dirigente política se refirió al reciente fallo judicial a favor de Santiago Uribe, hermano del exmandatario, como «una luz de justicia en este país», argumentando que la familia Uribe ha sido víctima de una persecución política motivada por su éxito en combatir la violencia y el narcotráfico.
La senadora aseguró que la izquierda política en Colombia no le perdona a Uribe haber logrado avances significativos en la lucha contra los grupos armados ilegales. “Treinta mil muertos al año recibió Uribe este país en 2002, la cifra más alta de la historia de violencia política en Colombia», enfatizó, subrayando que los indicadores de seguridad mejoraron drásticamente durante su mandato.
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Recordó cómo el gobierno de Uribe transformó al Ejército Nacional, devolviéndole su capacidad operativa y su reputación. “Volvió el ejército a ser un gran ejército. Estaban completamente desmantelados. Eran frecuentes los secuestros de militares y policías que duraban años en manos de la salvaje guerrilla», afirmó, aludiendo a casos emblemáticos como el del general Luis Mendieta, quien estuvo secuestrado por más de una década.
La operación Jaque y la lucha contra los cultivos ilícitos
Uno de los logros más destacados de la administración Uribe, según la senadora, fue la ejecución de la operación Jaque, un operativo militar de inteligencia que liberó a 15 secuestrados, entre ellos Íngrid Betancourt, en 2008.
Cabal calificó esta acción como “la más importante de cualquier ejército del mundo” y atribuyó su éxito al liderazgo y patriotismo del entonces presidente.
En cuanto a la lucha contra el narcotráfico, la precandidata presidencial señaló que Uribe logró reducir significativamente las hectáreas de coca en el país, implementando programas de sustitución obligatoria de cultivos ilícitos por palma, cacao y otros productos legales. “Le devolvió al Catatumbo la vida a sus comunidades”, expresó, al tiempo que criticó las políticas actuales que, según ella, legitiman la economía ilegal.
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Críticas al gobierno actual y a los detractores de Uribe
La senadora aprovechó su intervención para cuestionar las políticas de seguridad y lucha contra el narcotráfico del actual gobierno de Gustavo Petro. Según Cabal, la permisividad frente a los cultivos ilícitos y la criminalidad ha agravado los problemas de violencia en regiones como el Catatumbo, el Cauca y el Putumayo. “No más complacencia con la criminalidad”, exclamó, señalando que el narcotráfico sigue siendo la principal causa de violencia en el país.
Cabal también lanzó una dura crítica contra quienes cuestionan a Uribe y a su familia, calificándolos como «personajes menores» que no tienen la autoridad moral ni los logros para juzgar al expresidente. “Que quienes hoy creen que tienen la estatura de Uribe Vélez para acusarlo a él y a su familia se miren al espejo porque son personajes menores que no le han dado un golpe a la vida”, afirmó.
En su discurso, la líder opositora concluyó ratificando su compromiso con la defensa del legado de Álvaro Uribe y su familia. “Seguiremos defendiendo la verdad de un presidente que nos devolvió la libertad y nos devolvió la vida”, expresó con vehemencia, destacando la valentía de un juez que, según ella, tuvo el carácter y valor civil para emitir un fallo justo en el caso de Santiago Uribe.