“La ganadería necesita política pública en sostenibilidad y trazabilidad”: Lafaurie en la COP 16

Según el dirigente es necesario agregar valor a la producción y a los subproductos alimenticios pero se requiere política pública para reconversión a sistemas silvopastoriles que generen eficiencia y mejoren la biodiversidad. Sabemos hacerlo y somos referente internacional. Asimismo, se requiere tercerizar la trazabilidad bovina, para que, entre estas soluciones, se logren los requerimientos de los mercados.

La ganadería necesita política pública en sostenibilidad ganadera y en trazabilidad bovina, para mejorar su competitividad y mostrar a los mercados del mundo que no afecta la biodiversidad y, también, revelar el origen de los alimentos e incluso, obtener mejores precios en el comercio internacional.

Así lo manifestó José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de Fedegán, en la COP 16, particularmente en el 1er Congreso Naturaleza & Empresa, de la ANDI y el Consejo Gremial Nacional.

“En los mercados internacionales hay una prima adicional cuando se cumple más allá de los estándares. Acabo de llevar de SIAL, la feria agroalimentaria más grandes del mundo que tiene lugar en Paris (Francia), incluso lo vi hace 2 años en Dubai, en otra feria de alimentos, que evidentemente, un trozo de carne que captura carbono vale más que uno que no lo captura”, sostuvo.

El mundo lo que quiere es buscar mayor valor agregado en sus productos finales y eso pasa porque la base, en nuestro caso la ganadería, pueda tener unos sistemas de integración con trazabilidad que le permita decirle al consumidor final, esto capturó carbono o se hizo de conformidad con lo que está pidiendo el mercado internacional.

https://twitter.com/Fedegan/status/1851997270440579401

¿Cómo vincular a los pequeños?

La pregunta es ¿Qué hacer con el pequeño productor rural para que mejore realmente no solo su competitividad sino también su integración en la cadena?

“El problema es cómo permitimos que el pequeño productor también se integre a esa agregación de valor y pueda llevarlo al consumidor final, que si la estructura de costos sube, muy seguramente quienes quieran comprar alimentos de esta naturaleza tendrán que pagar un poco más que los otros”.

Logros en sostenibilidad

Fedegán lleva 15 años tratando de incentivar la ganadería sostenible en los que ha invitado incluso a la empresa, especialmente a la minero energética, pero también a otras como el grupo Nutresa, para hacer alianzas estratégicas.

El gremio con apoyos internacionales y empresas colombianas que nos han ayudado a agregar valor, ha logrado reconvertir más de 320.000 hectáreas en manejo sostenible de ganadería. Asimismo, tiene más de 44.000 hectáreas en sistemas intensivos silvopastoriles y más de 34.000 en áreas de conservación. Además, hace poco logró crear el Sello de Ganadería Sostenible, instrumento público que se obtuvo con el apoyo de los ministerios del Medio Ambiente y de Agricultura y ya existen 40 ganaderos que ostentan esta certificación.

Según Lafaurie, hay que proyectar a futuro la ganadería que no solamente tiene una mayor capacidad productiva sino que incorpora 7 toneladas de carbono por hectárea al año y, al mismo tiempo, mejora los suelos y genera corredores biodiversos.

Grandes recursos

“En consecuencia, cuando uno tiene cerca de 700.000 pequeños ganaderos en Colombia que necesitan realmente una reconversión productiva, es necesario ver como uno tiene aliados estratégicos que son capaces de integrarse y lograr la captura de carbono”, reiteró.

Ese reto implica grandes recursos de capital para poder desarrollarlo. Una hectárea de ganadería silvopartoril cuesta $5 millones, pero en el retorno de la inversión le queda produciendo 5 veces más.

Fedegán ha propuesto establecer 10 millones de hectáreas en ganadería silvopastoril con apoyo del Estado, aunque solo un millón representaría una revolución ambiental y productiva. En 2019 el presidente Duque, se comprometió a implementar apenas 100.000 y no cumplió. En este gobierno tampoco se ha implementado una sola hectárea.

Le decía al gobierno de Colombia a propósito de los temas de reforma agraria. Si una persona tiene mil hectáreas, donde alberga mil cabezas de ganado, vende la mitad y reconvierte, en esas 500 hectáreas, podría tener al menos 2.000 cabezas, es decir, más que las que tenía con mil hectáreas y, las otras 500 has reconvertidas en sistemas silvopastoriles, podrían tener 2.000 más, es decir, reconvertir las mil, podría multiplicar por 4 o por 5 la cantidad de animales por unidad de superficie con captura de carbono.

¿Quién se apunta a ello?

¿Cómo lograr que el sector minero energético, o que el sector que quiere tener productos con mayor valor agregado, o aquellos que no capturan carbono, son capaces de decirle a un gremio, como Fedegán, camine y vinculemos 2.000 o 4.000 pequeños productores para que puedan reconvertir su ganadería, capturar carbono y producir más carne y leche para los mercados?

Hagamos una gran alianza

Si la ganadería tiene hoy 30 millones de hectáreas, algunas muy poco eficientes, precisamente por falta de árboles y por la ausencia de sistemas sostenibles ¿por qué no hacemos una gran alianza?, se preguntó ante el nutrido escenario de empresarios y expertos internacionales.

¿Cómo podemos lograr una integración más sólida para que en vez de tener -como fue la oferta que hicimos en el año 2007- 34 millones de hectáreas con 20 millones de cabezas, pudiéramos tener solo 20 millones de hectáreas en ganadería -pero  sostenible intensiva- con 70 millones de cabezas, como lo hemos venido demostrando a lo largo del tiempo?

El gran problema es que la narrativa termina siendo terriblemente perjudicial porque cuando uno se acerca a buscar aliados, terminan enviando mensajes equívocos.

“Invito a los empresarios y al público en general para que pasemos del señalamiento y el activismo a la colaboración o a la cooperación para poder tener, de la base del campesino, a aquel que realmente tiene que integrarse de manera sostenible”.

Tercerizar la trazabilidad, elemento clave

De acuerdo con Lafaurie otro elemento clave que requiere de decisiones del gobierno, es el tema de trazabilidad.

Recordó que Fedegán en el año 2009 arrancó con el gobierno un proceso y, en el 2012, logró tener prácticamente trazado todo el inventario bovino de la frontera con Venezuela, país que tiene problemas de carácter sanitario. “Lamentablemente los años posteriores estos instrumentos quedaron por fuera del control de Fedegán y eso fue lo que permitió, entre otras cosas, con las guías de movilización, que entrarán de contrabando 6 millones 400.000 animales de Venezuela en el periodo de 2016, 2017 y 2018”, agregó.

Nuevamente el gremio participó en la reconstrucción del sistema de trazabilidad y precisamente se encuentra en diálogos con el gobierno para darle vía libre y ponerlo a funcionar.

Los esfuerzos que hace una empresa tan importante como Nutresa en los mercados internacionales, necesariamente tiene que llevar un producto trazado desde el origen hasta el producto final.

“Pero esa trazabilidad cuyo responsable obligatoriamente tendrá que ser el Estado, sino lo terceriza con el sector privado, no va a ser posible que sea una realidad que impacte mercados y que permita integrar totalmente la cadena”, enfatizó Lafaurie en la COP 16.