La economía colombiana camina al filo de la recesión técnica

Aunque el país pudo recuperarse de las cifras negativas presentadas en el tercer trimestre de 2023, las proyecciones a futuro implican la participación decidida del Gobierno Nacional para impulsar sectores que jalonan el PIB y que tienen estadísticas de producción por debajo de cero.

Una señal inequívoca de las erradas decisiones que ha tomado en todo sentido el Gobierno Nacional en cabeza de Gustavo Petro, son las estadísticas relacionadas con el crecimiento económico y las preocupantes proyecciones a futuro, dada la realidad del país.

Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane), el cuarto trimestre del año pasado, el crecimiento de la economía fue de tan solo el 0,3%; en mediciones anteriores, se tiene que estuvo entre el -0,3% y el  -0,6%. Estas cifras claramente son inferiores a los pronósticos del gobierno y los analistas.

Piedad Urdinola, directora del Dane, dijo que a pesar de lo dramática que se ven las cifras por debajo de cero, la economía nacional creció en un 0,6%, evitando así la recesión técnica, pero, develando los muchos problemas que vive el país, ya que, la estadística significa una reducción de 6,7% en comparación con 2022.

Analistas coinciden en que este desbarajuste de la economía obedece a los malos momentos que están pasando en términos de producción, sectores importantes para estas dinámicas como la Industria, el Comercio y la Construcción, los cuales vienen de capa caída hace largo rato.

Por otro lado, contrastando con estos números más bien negativos, “Administración pública y defensa; planes de seguridad social de afiliación obligatoria; Educación; Actividades de atención de la salud humana y de servicios sociales creció 3,9%”, dijo Piedad Urdinola.

Mirando más a profundidad los datos presentados a la opinión pública por el Dane, puede notarse que dentro de las actividades que cayeron en su producción, se encuentran varias de las que jalonan el PIB y los indicadores de ocupación, entre estos se encuentran: Construcción que cerró con números negativos: -4,2%, Industrias manufactureras que cayó a -3,5%) y Comercio que fue el menos golpeado de los tres, pero con saldos igualmente ‘rojos’: -2,8%.

Daniel Gómez, vicepresidente del Consejo Colombiano de Competitividad, es enfático en que el principal responsable de tales indicadores es el Gobierno Nacional, pues, según él, “ya no corresponde solo a un ajuste cíclico. Refleja la incertidumbre política, el mayor riesgo, la falta de señales claras, la desconfianza entre sector privado y gobierno. Discursos incendiarios, mala planeación, peor ejecución”.

Por su parte, Jonathan Malagón, presidente de Asobancaria, aunque parece enviar un mensaje de tranquilidad por lograr recuperar los indicadores que estaban por debajo de ceros, pone de presente la difícil tarea que tiene por delante el presidente Petro y su gabinete.

“El crecimiento económico de 0,3% en el cuarto trimestre evidencia que la actividad productiva continuó su proceso de ajuste, pero disipa los temores de caer en una recesión técnica”, aunque destaca que “el crecimiento de 0,6% de 2023 fue muy inferior al promedio histórico, hecho que nos obliga a redoblar los esfuerzos para consolidar el proceso de recuperación económica en los próximos meses”, dijo Malagón.

Así las cosas, es claro que el única camino para enrutar el crecimiento económico hacia las proyecciones y los porcentajes óptimos, es imperativo que se impulse desde el gobierno la recuperación de los sectores que impulsan la economía de un país.