El galardón reconoce a mujeres que protegen la vida en contextos de alta vulnerabilidad y otorga respaldo internacional para fortalecer su labor. Organizaciones destacaron que el premio aumenta el escrutinio global sobre La Guajira y exige mayores garantías estatales.
La defensora wayuú Jazmín Romero Epiayú, integrante del movimiento Colombia Soberana, fue reconocida con el Premio Internacional Ginetta Sagan de Amnistía Internacional, uno de los galardones más significativos para mujeres que trabajan en zonas donde las violaciones a los derechos humanos son persistentes. Su liderazgo ha sido determinante en la protección de niñas, mujeres y comunidades de la Alta y Media Guajira frente a presiones mineras, conflictos territoriales y amenazas contra la integridad de las autoridades tradicionales.
El premio, creado para honrar el legado de la activista italiana Ginetta Sagan, distingue cada año a una mujer cuyo trabajo representa un esfuerzo extraordinario por salvaguardar la vida y la libertad en contextos de riesgo. Amnistía Internacional señala que el reconocimiento se concede a “mujeres que, aun bajo peligro constante, mantienen procesos de protección y defensa colectiva”, en alusión a liderazgos que resisten criminalización, amenazas armadas o presiones empresariales.
Además del reconocimiento simbólico, el premio incluye una dotación de 20.000 dólares orientada a fortalecer la capacidad operativa de la galardonada. Este apoyo busca garantizar que defensoras como Romero Epiayú puedan continuar su labor en condiciones más seguras y con mayor visibilidad internacional.
Este galardón, según la organización, “mejora la capacidad de la beneficiaria para vivir y trabajar libremente y protege su trabajo al aumentar el escrutinio global sobre la región y la crisis en la que actúa”. En el caso de La Guajira, ese escrutinio adquiere relevancia debido a los impactos de la minería del carbón, las presiones asociadas a nuevas formas de extracción y la tensión entre proyectos económicos y derechos territoriales.
Romero Epiayú ha liderado acciones comunitarias centradas en la defensa del agua, la soberanía alimentaria, la autonomía cultural y los derechos de niñas y mujeres expuestas a múltiples formas de violencia. Organizaciones indígenas y colectivos de derechos humanos celebraron el reconocimiento y pidieron al Estado colombiano reforzar las garantías para su vida e integridad.
Igualmente, señalaron que la trayectoria de la lideresa wayuú “representa un faro de esperanza” para quienes enfrentan riesgos similares en el país y destacaron la urgencia de avanzar en mecanismos de protección diferenciada para mujeres indígenas en territorios donde confluyen intereses económicos y conflictividades históricas.
Con este galardón, Jazmín Romero Epiayú se consolida como una de las voces más influyentes en la defensa de los derechos territoriales en Colombia y refuerza la visibilidad internacional sobre la situación humanitaria y ambiental que atraviesa La Guajira.
