El gobierno nacional no se ha pronunciado para rechazar estos actos que atentan contra los postulados del derecho internacional humanitario.
Ante el silencio del gobierno de Gustavo Petro, las FARC sigue adoctrinando niños en varias regiones de Colombia. El más reciente caso se presentó hace un par de días en el centro educativo rural El Recreo, ubicado en el municipio de Sardinata, en Norte de Santander, hasta donde llegaron tropas del Frente 30 de las FARC para entregar kits escolares.
La preocupante situación salió a la luz pública cuando empezó a circular en redes sociales un video en el que se ve a los guerrilleros entregar cuadernos y otros elementos a los menores de edad quienes, junto a sus maestros, agradecieron.
“Le agradecemos al Frente 33 de las Farc por estos kits escolares”, dijo una de pequeñas estudiantes.
Sin embargo, esta no es la primera vez que el grupo criminal usa este tipo de estrategias para adoctrinar a menores de edad. El pasado mes de febrero en la subregión de La Cordillera de Nariño, las FARC, principalmente del Frente Franco Benavides, regalaron cuadernos, separadores y calendarios con imágenes de varios excomandantes guerrilleros, entre ellos el Mono Jojoy, Tirofijo, Jesús Santrich, Alfonso Cano, Mayimbú, Jhonier.
Hasta la fecha, el presidente Gustavo Petro no se ha pronunciado para rechazar estos actos que atentan contra los postulados del derecho internacional humanitario.
Rechazo
A las expresiones generales de rechazo por esta alarmante situación se sumó la Defensoría del Pueblo que calificó como una muestra del control que tiene este grupo armado ilegal.
“No solo evidencia el control social y territorial que ejerce el grupo armado ilegal en la zona, sino que también da cuenta del aumento del riesgo que corren niñas, niños y adolescentes de ser reclutados bajo falsas esperanzas de adquisición de poder, armas y otras ilusas promesas”, manifestó el defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.
El funcionario agregó que la población civil, especialmente los menores de edad, no deben formar parte del accionar de las estructuras al margen de la ley.
“La infancia y la adolescencia deben estar en las escuelas y colegios formándose y desarrollando su pleno potencial, no acompañando actividades que adelanten las organizaciones armadas”.
