La operación involucró a la Fuerza Aérea Colombiana, el Ejército Nacional, la Armada de Colombia y la Policía Nacional. Con esta maquinaría se extraían 4.000 gramos de oro al mes.
En una operación conjunta y coordinada, autoridades recuperaron aproximadamente 10 hectáreas de zona vegetal afectada en el Cauca.
Durante el operativo, realizado en la vereda San Antonio de Guromendy, en el municipio de López de Micay, fueron incautadas cuatro excavadoras, dos motores industriales y una draga tipo buzo, que causaban graves daños ambientales.
Estas herramientas habían sido utilizadas por los Grupos Armados Organizados Residuales, específicamente a las estructuras GAO-r Carlos Patiño y Jaime Martínez, que operan en la región, para producir una deforestación de 6.000 árboles y remover 66.000 metros cuadrados de suelo.
La intervención de las aeronaves y tripulaciones del Comando Aéreo de Combate No. 7 fue crucial para el éxito de la misión, afectando económicamente a estos grupos ilegales y apoyando la recuperación de fuentes hídricas contaminadas.
Resultados
El despliegue ofensivo en el Pacífico caucano permitió localizar y destruir maquinaria valorada en 1.380 millones de pesos, que era utilizada para extraer mensualmente más de 4.000 gramos de oro, cuyo valor en el comercio ilegal asciende a 1.200 millones de pesos.
Esta operación no solo afecta las finanzas de los grupos ilegales, sino que también limita las rentas obtenidas por la extracción y comercialización del mineral.
El principal objetivo de las tropas es detener la grave deforestación causada por la extracción ilegal de minerales. La recuperación vegetal de las 10 hectáreas afectadas podría tomar entre 20 y 30 años.
Este operativo refleja el compromiso de las Fuerzas Armadas Colombianas con la protección de la biodiversidad en el suroccidente del país.