Los propietarios de estos bienes de alto valor económico figuraban como beneficiarios del Sisbén y no registraban ingresos financieros formales ni actividades económicas estables.
La Fiscalía General de la Nación ocupó con fines de extinción de dominio nueve casas y once lotes avaluados en más de 25.000 millones de pesos, pertenecientes a los hermanos José de Jesús, Juan Salvador y Erwin Rafael Pérez Escudero.
Según las autoridades, estas personas harían parte de un clan familiar dedicado al acopio y envío de cocaína desde municipios de La Guajira y Cesar hacia el Caribe y Europa.
Durante el curso de la investigación, un fiscal de la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio constató que los hermanos Pérez Escudero, quienes figuraban como beneficiarios del Sisbén y no registraban ingresos financieros formales ni actividades económicas estables, eran, sin embargo, propietarios de numerosos inmuebles de alto valor económico.
Se presume que estos bienes fueron adquiridos con recursos provenientes del narcotráfico.
De acuerdo con el material probatorio, el clan almacenaba grandes cantidades de cocaína para su posterior salida marítima por el Caribe colombiano hacia Curazao y Aruba, desde donde la droga era enviada a países europeos.
La Fiscalía impuso medidas cautelares de suspensión del poder dispositivo, embargo y secuestro sobre los bienes, diligencias que fueron materializadas por funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) en operativos realizados en Maicao y Riohacha (La Guajira).
Así mismo, otras propiedades recibieron medidas jurídicas complementarias.
La Sociedad de Activos Especiales (SAE) será la encargada de la administración de los bienes ocupados mientras avanzan los trámites legales correspondientes.
