El gremio de los comerciantes calificó como “equivocada” la propuesta del Gobierno de subir del 35% al 40% los aranceles a vehículos y motocicletas de combustión. Según Fenalco, la medida encarecerá los precios, frenará la inversión y golpeará a la clase media.
La Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) calificó como improvisada y perjudicial la propuesta del Gobierno Nacional de aumentar los aranceles de importación para vehículos y motocicletas de combustión interna, pasando del 35% al 40%, el tope máximo permitido por la Organización Mundial del Comercio.
El proyecto de decreto, que cobijaría un amplio grupo de subpartidas de la partida 87.03, busca —según el Ejecutivo— impulsar la sustitución de importaciones y promover la instalación de plantas de producción en el país. Sin embargo, Fenalco advirtió que la medida carece de sustento técnico y afectará directamente a los consumidores y al sector automotor.
“Esta medida es completamente absurda y desconoce la evidencia histórica”, afirmó Jaime Alberto Cabal, presidente del gremio.
“Colombia ha intentado desde la década de 1950 aplicar políticas de protección arancelaria para estimular la producción local, pero los resultados han sido ineficaces: no consolidaron una industria fuerte ni atrajeron inversión suficiente para competir internacionalmente. Repetir ese modelo no ofrece garantía de éxito”, añadió.
El gremio alertó que un aumento al 40% del arancel impactará directamente el costo de los vehículos y motocicletas de combustión, los más accesibles para la mayoría de los hogares colombianos.
“Esto podría traducirse en precios más altos, menor dinamismo del mercado automotor y una afectación directa a millones de familias y trabajadores que dependen de la motocicleta como medio de transporte diario”, precisó la federación.
Fenalco también cuestionó la falta de previsibilidad en las decisiones del Gobierno.
“En lugar de emprender iniciativas improvisadas, si Colombia realmente quiere atraer inversión masiva, debe garantizar estabilidad jurídica, reglas claras, estables y confiables”, sostuvo Cabal.
Según el dirigente, medidas de este tipo generan incertidumbre económica, desincentivan la llegada de capital extranjero y debilitan las decisiones de inversión nacional.
“La inversión extranjera directa ha venido cayendo justamente por la falta de previsibilidad y la constante modificación de normas y cargas”, advirtió.



