Experto de Fedegán sugiere incluir la carne de res en los programas gubernamentales de compras públicas

Oscar Cubillos, director de Planeación y Estudios Económicos de Fedegán, sugirió en su columna de opinión, la necesidad de promover las negociaciones de este bien alimenticio en el mercado interno del país y lo hace ante la perdida de competitividad que se observa para las operaciones del comercio exterior.  

Articular los programas públicos a la oferta interna de carne de res, específicamente con los PAE, FFAA y comedores comunitarios, entre otros y, para dicha gestión es de suma importancia que a las ejecuciones presupuestales de los respectivos ministerios se les imprima de una mayor celeridad.

Esta es una propuesta que realiza Oscar Cubillos Pedraza, director de Planeación y de Estudios Económicos de Fedegan-FNG en su reciente columna de opinión titulada  “Mercado interno mientras llega la competitividad cambiaria”.

Esta es una sugerencia que busca precisamente promover el dinamismo tanto del consumo de carne res como también las operaciones comerciales de este bien alimenticio en el comercio interno del país.

¿Por qué razón? Porque no existen las condiciones óptimas de economía y competitividad necesarias para realizar operaciones de comercio exterior de este bien alimenticio de proteína de origen animal.

Su gran competidor tiene mejor precio

Este economista en su escrito se refiere explícitamente a dichos factores. “Hoy el precio del kilo del novillo gordo en pie en Colombia es de USD1,97 mientras que el de Brasil alcanza USD1,77, es decir, que existe una brecha de ¢20 que afecta considerablemente la dinámica de la economía ganadera”, manifestó.

Resaltó que en septiembre de 2023 ese diferencial era de ¢55, lo que indica que las condiciones vienen cambiando, bien en la tasa de cambio, o en el precio interno del novillo en cada uno de estos dos países.

Las brechas

Se refirió asimismo a la tasa de cambio en Brasil y dijo que la moneda de esta vecina Nación, el real, ha tenido fluctuaciones de apreciación y depreciación lo cual afecta a la ganadería colombiana porque pierde competitividad pues Brasil es su principal competidor.

Recalcó que, entre enero y julio de 2023, el real se apreció 9,5% mientras que, en Colombia, en el mismo lapso de tiempo, el peso se apreció 18%, lo que indica que allí se perdió competitividad.

Dijo que, entre agosto 1 de 2023 y abril 21 de 2024 el real se depreció 11% y aunque el peso colombiano también vivió el mismo fenómeno, este apenas lo hizo en 1%, creando otra brecha en la competitividad. En solo ese horizonte, desde enero de 2023 hasta abril de 2024 el delta es de 19%, por movimientos cambiarios.

“Para intentar equipararse, el precio interno del novillo en Colombia ha tenido que descender. Es el mercado. La situación no es nueva, y ya ha ocurrido en tres oportunidades en 2009, 2018 y en 2022”, advirtió.

Bajar tasas

Enfatizó que es indudable que la alta tasa de interés incide para que ingresen más dólares a la economía y la tendencia cambiaria sea la de un peso apreciado (mayor revaluación dirían algunos), por ende, considera de gran trascendencia que el Banco de la República baje la tasa con celeridad.

Pero no es optimista en este sentido pues agrega que, “la experiencia nos dice que esa disminución por parte del Banco Central realmente no ocurrirá con rapidez”.

Negociar en el mercado interno

Ante dicha coyuntura y ante la baja dinámica de las exportaciones de carne y de ganado en pie, lo más prudente es concentrarse en las negociaciones propias del mercado interno.

En ese sentido advierte no desconocer dos problemáticas que igualmente afectan de manera permanente:

1.El incremento de la clandestinidad: situación que le hace un daño inmenso al sector ganadero y a la industria transformadora al tener que enfrentar una competencia totalmente desleal,

2. Retroceso en el consumo de carne: realidad que sucede por cuenta de esa misma clandestinidad y, también, porque la economía viene desacelerada y, con esto, los bolsillos de los colombianos resentidos en su capacidad de compra.

De ahí que Cubillos Pedraza, considere prudente que la carne de res se incluya en la oferta de los programas de compras públicas como lo estipulo el gobierno recientemente con la leche y los productos lácteos.

Ver columna de opinión en siguiente link: https://n9.cl/8m7ov