Además del Clan del Golfo, también serán declaradas organizaciones terroristas el Tren de Aragua, que opera principalmente en Venezuela y tiene presencia en Colombia; la Mara Salvatrucha (MS-13) de El Salvador, y cinco cárteles mexicanos: Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, Noreste, Unidos y la Nueva Familia Michoacana.
El Clan del Golfo hace parte de la lista de ocho grupos armados ilegales de América Latina que el Departamento de Estado de los Estados Unidos declarará como organizaciones terroristas. Esta medida se basa en una orden previa firmada por el presidente Donald Trump el 20 de enero, cuyo objetivo es combatir a los principales cárteles del narcotráfico, considerados una «amenaza a la seguridad nacional».
El Clan del Golfo es el grupo armado ilegal más numeroso de Colombia, con un crecimiento del 95 % en sus filas desde 2018. Actualmente, opera en 238 municipios de 16 departamentos. Aunque su principal actividad delictiva es el narcotráfico, también ejerce control sobre la minería ilegal en el Bajo Cauca antioqueño, así como la extorsión en diversas regiones. En la zona del Darién, el tráfico de migrantes representa su segunda fuente de ingresos.
Además del Clan del Golfo, también serán declarados organizaciones terroristas el Tren de Aragua, que opera principalmente en Venezuela y tiene presencia en Colombia; la Mara Salvatrucha (MS-13) de El Salvador, y cinco cárteles mexicanos: Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, Noreste, Unidos y la Nueva Familia Michoacana.
Impacto en los diálogos con el gobierno colombiano
La posible designación del Clan del Golfo como organización terrorista podría afectar las negociaciones de paz iniciadas por el gobierno de Gustavo Petro en agosto del año pasado. A pesar de que se reconocieron voceros para la mesa de diálogo, el proceso enfrenta obstáculos, entre ellos la negativa del grupo a someterse a la justicia. La nueva clasificación podría complicar aún más la continuidad de estas conversaciones.
