El sector público no le caminó al día cívico de Petro

Alcaldes de Bogotá, Medellín, Santa Marta, Barranquilla y entidades de distinto orden, como la Rama Judicial, el Consejo Nacional Electoral, la Registraduría, la Procuraduría, y la Fiscalía, prestaron servicios a sus usuarios normalmente.

La actitud desafiante de Petro volvió a jugarle una mala pasada. El decreto a través del cual se estableció este viernes 19 de abril como día cívico, provocó una oleada de críticas y traumatismos en algunas instituciones públicas donde se cumplió a rajatabla lo solicitado por el presidente.

Según el Jefe de Estado, la medida busca contribuir a disminuir los niveles de consumo de agua y energía eléctrica, acompasando la iniciativa con las metas de consumo que necesita alcanzar la ciudad de Bogotá, sometida a racionamiento de agua hace más de una semana.

“Queremos decretar un día cívico para que la gente no utilice la energía eléctrica al máximo posible. Así podemos guardar la energía que necesitamos y se disminuye el consumo de agua potable en estas grandes ciudades”, dijo el presidente.

Sin embargo, dado que el 19 de abril es el día del cumpleaños del mandatario y fecha en la que se fundó el movimiento guerrillero donde este militó, un amplio sector de la opinión pública considera que el objetivo real es resaltar esos eventos.

Uno de los primeros en reaccionar, desechando la solicitud de Petro, fue Carlos Fernando Galán, alcalde de Bogotá, quien a través de sus redes sociales se desmarcó del día cívico decretado por la presidencia.

“Mañana, la administración distrital operará con normalidad. La necesidad de cambiar nuestros hábitos y reducir nuestro consumo de agua no es cuestión de un día, es un esfuerzo de largo aliento y debe ser sostenible en el tiempo. Más que un día cívico, Bogotá necesita a todos sus servidores públicos dedicados a lograr la reducción en el consumo de agua y a los ciudadanos poniendo de su parte por el bien común”, afirmó el alcalde Carlos Fernando Galán.

A Galán se unieron alcaldes de ciudades como Medellín, Santa Marta, Barranquilla y entidades de distinto orden, como: la Rama Judicial, el Consejo Nacional Electoral, la Registraduría, la Procuraduría, la Fiscalía, etc.

Por su parte, Francisco Lloreda, fue enfático en afirmar que la ambigüedad en la redacción del decreto hace quedar muy mal al mandatario, pues, solo quienes quieren congraciarse con él acatarán la medida.

“Ha expedido un decreto ‘cantinflesco’, en el que declara día cívico y a reglón seguido reconoce que no puede obligar a obedecerlo a los departamentos, municipios y a las otras ramas del poder. Ya gobernadores, alcaldes y la Rama Judicial han dicho que van a trabajar”, dijo Lloreda.

Jaime Alberto Cabal, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), sostiene que Petro se extralimita en su declaratoria, porque aun siendo el Jefe de Estado, no tiene facultades para cambiar el sentido de los días del calendario.

“La declaratoria de un día cívico no puede implicar que en el futuro se convierta en festivo, puesto que el presidente de la República no tiene facultades para establecerlos. Los festivos están previstos en la ley 51 de 1983 y esta no ha sido modificada para que el día 19 de abril de 2024 se convierta en festivo”, puso de presente el dirigente gremial.

Otra de las que se refirió al asunto, fue la precandidata presidencial y líder de la oposición, María Fernanda Cabal, quien cuestionó la sugerencia explícita al grupo guerrillero al que perteneció el presidente.

“Este parece el relanzamiento del grupo terrorista M-19, hoy que Petro de manera ilegal decretó “día cívico”. El domingo saldremos cientos de miles en contra de este desgobierno”, posteó al precandidata presidencial en su cuenta en la red social X.

Finalmente, en horas de la mañana de este viernes, a las afueras de la Cancillería, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, reconoció que el decreto fue improvisado y ocasionó traumatismo en algunas instituciones por falta de previsión.