De potencia turística a cementerio empresarial: investigación de Cabal sobre los sectores más golpeados en el gobierno Petro

Sectores clave como la agricultura, la industria manufacturera y el turismo han sido los más afectados, con un aumento alarmante en los procesos de reorganización empresarial. Cabal responsabiliza al gobierno por implementar políticas erráticas que han generado incertidumbre y crisis en el sector productivo, afectando el empleo y provocando la salida de importantes empresas del país.

Bajo el explosivo hashtag #PetroEsPeorQueElCovid, la senadora María Fernanda Cabal encendió las redes sociales al revelar un dato que sacude la opinión pública: durante el gobierno de Gustavo Petro, la liquidación de empresas ha superado las cifras alcanzadas en el peor momento de la pandemia. Cabal sostiene que el panorama empresarial colombiano se encuentra en crisis debido a las políticas erráticas y el desdén del gobierno hacia el sector productivo.

La investigación de la senadora arrojó que en 2023 se liquidaron 233.404 empresas, superando las 195.042 que cerraron durante el crítico año 2020, cuando el mundo entero estuvo paralizado por el COVID-19. Más allá del simple dato, la senadora advierte que este colapso responde a la incertidumbre económica generada por el gobierno de Petro, su falta de claridad en las políticas públicas y una hostilidad implícita hacia los empresarios.

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El número de empresas en reorganización también se disparó: de 146 procesos en 2020, la cifra se ha incrementado a 665 en 2023, lo que refleja una tendencia alarmante de empresas que luchan por sobrevivir ante condiciones adversas.

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¿Cuáles son los sectores más golpeados?

La investigación publicada por Cabal también detalla el impacto sectorial de esta crisis. En el sector agropecuario, la liquidación de empresas pasó de 2614 en 2020 a 3327 en 2024, una pérdida preocupante en un país donde el campo es clave para la seguridad alimentaria. Las industrias manufactureras, por su parte, vieron un aumento de cierres de 19.553 en 2020 a 27.305 en 2024, dejando en evidencia la fragilidad de un sector que debería ser motor de desarrollo.

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Pero el golpe más fuerte se lo ha llevado el turismo y la hotelería donde las cifras son demoledoras: 32.316 empresas cerradas en 2020 frente a 51.127 en 2024. Esto deja en entredicho la narrativa del gobierno sobre convertir a Colombia en una «potencia mundial del turismo».

La migración empresarial y el desempleo

El panorama se agrava con la salida de empresas icónicas del país. General Motors y Colchones Paraíso han sido algunas de las compañías que han decidido trasladar sus operaciones a mercados más estables. Esta tendencia de desinversión tiene un impacto directo en el empleo, que según el DANE se situó en 11,6 % en enero de 2024, una cifra que podría seguir escalando a medida que el sector privado pierda confianza en el rumbo del país.

El llamado de Cabal: «al empresario no hay que perseguirlo»

Ante este panorama, la senadora Cabal fue contundente: «Al empresario no hay que perseguirlo. Al contrario, hay que darle garantías para que pueda trabajar y desarrollar riqueza».

Para ella, la crisis económica que enfrenta Colombia no es producto de una coyuntura global, sino de las decisiones políticas del actual gobierno, que, según su análisis, han generado un ambiente hostil para la inversión y el emprendimiento.

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El informe de Cabal ha generado una ola de reacciones. Mientras el gobierno insiste en que la economía colombiana está en proceso de transformación, los empresarios y analistas alertan sobre un escenario de incertidumbre que podría ahuyentar la inversión y prolongar la crisis.

Lo cierto es que la economía colombiana enfrenta un desafío monumental. Y mientras el gobierno insiste en su modelo, la fuga de capitales y el cierre de empresas parecen contar otra historia.

La pregunta sigue en el aire: ¿se tomarán las medidas necesarias para corregir el rumbo o seguirá la tendencia de debacle económica?