La crisis por las diferencias entre Estados Unidos y Colombia dejó claro, entre los mayores agentes de la economía nacional, el peligro y la fragilidad que se vivió para la mayoría de los industriales y empresarios colombianos. La percepción es que se continuará alimentando la incertidumbre en el país.
Foto: estadosunidos.co
Gran revuelo marcó a Colombia este lunes 27 de enero de 2024, justo el día en el que se solucionaron las diferencias entre los gobiernos de Estados Unidos y de Colombia. Se esperaba una fuerte apreciación de la moneda estadounidense frente al peso colombiano pero, no obstante, se registró un descenso de apenas 1.35 % ($57.19) al cerrar en $4.188,46.
No podría haber sido peor ya que se trata de un socio comercial a donde se dirigen el 29 % de las exportaciones colombianas y un país con el que se han negociado según el DANE, entre enero y noviembre de 2024 USD 13.106 millones, cifra que revela incluso, un incremento del 7,6 %.
También las importaciones por USD 13.400 millones que hubiesen quedado en el aire e impactado múltiples sectores en Colombia.
“Un incremento de aranceles generaría caos en la economía colombiana. “Un arancel del 25 % y luego del 50 % a las exportaciones tendría consecuencias gravísimas para nuestro balance externo, la disponibilidad de divisas y el control de la inflación”, dijo al periódico El Tiempo, Luis Fernando Mejía, director ejecutivo de Fedesarrollo.
“Estuvimos en el filo de la navaja. Si no se hubiera corregido la diferencia diplomática, el país estaría quebrado. Los efectos para la economía hubieran sido nefastos. Con dólar aumentando, se hubiera incrementado aún más la deuda externa, la inflación se habría salido de su razonamiento generando aumento en todos los productos de consumo de primera necesidad”, manifestó Camilo Sánchez Ortega, presidente del Consejo Gremial en Red + Noticias.
“Me complace ver que el problema se resolvió pues en Inversión Extranjera Directa, Colombia recibió más de USD 5500 millones en 2023, monto que seguramente generó cientos de nuevos empleos directos. Además, no podemos darnos el lujo de quedar por fuera del sistema financiero internacional, lo cual golpearía remesas, tarjetas de crédito, créditos, transferencias, corresponsales bancarios, entre otros”, señaló Javier Díaz, presidente de Analdex.
Vísperas de San Valentín
Estados Unidos está en la víspera de la temporada más relevante de su economía y es la celebración del día de San Valentín, época en la que los floricultores envían sus mayores volúmenes.
El asunto de tal proporción que, según Augusto Solano, presidente de Asocolflores, los primeros despachos de flores a EE. UU. iniciaron el 16 de enero de manera lenta, pero en este momento ya se habla de un flujo de 40 vuelos diarios.
“Se vivió una gran incertidumbre. “Si las medidas de Donald Trump se hubieran hecho efectivas las pérdidas hubieran sido incalculables”, expresó en la emisora La FM de RCN.
Las consecuencias se hubieran visto incluso en el país del norte. “A pesar de que 60 % de las flores se venden en grandes supermercados en EE. UU., existen miles de pequeñas floristerías en los pueblos de ese país que no aguantarían un vaivén de este tipo”, señaló.
Al igual que los floricultores los cafeteros vieron en peligro el 40 de las exportaciones, que significan más de USD 1100 millones a dicho destino comercial.
Relaciones con responsabilidad
Estados Unidos y Colombia es la principal fuente de materias primas, investigación, financiación, intercambio cultural y educativo. “Hacemos un llamado enfático para que se traten las relaciones comerciales con gran responsabilidad”, dijo el presidente de la Andi, Bruce Mac Master.
El ingreso económico de millones de colombianos depende de la capacidad que tengamos de poder venderle a ellos.
“Un ejemplo, es el sector floricultor que a ese destino envían exportaciones por USD 1700 millones anuales. Igual importancia tiene para sectores como el de confecciones, agrícola, industria, minero o servicios”, explicó.
Alimentara incertidumbre
El exministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, sostuvo en el diario económico Portafolio, que “La consecuencia más peligrosa es habernos puesto en el radar de los Estados Unidos, al inicio del gobierno Trump, con todas las implicaciones que tiene un gobierno de esta naturaleza y sin haber siquiera empezado a debatir el otro problema de fondo que es la producción de coca en nuestro país”.
Dijo que la crisis puso al país bajo mayor escrutinio, con implicaciones de largo plazo para la relación bilateral, que solo alimentarán la incertidumbre y afecta la relocalización de empresas para exportar a Estados Unidos.
Fortalecer relaciones
Por su parte, María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham Colombia, opinó que “si bien esta crisis parece estar superada, lo ocurrido debe ser una lección para reforzar el trabajo conjunto entre todos los sectores de la sociedad, con el fin de fortalecer y preservar las relaciones estratégicas entre ambos países. El diálogo y la cooperación deben seguir siendo la base de nuestra relación bilateral”.
Felipe Campos, economista y gerente de Inversión y Estrategia Alianza Valores y Fiduciaria, dijo a ASColombia que es muy temprano para pensar que puede haber afectaciones. Sin embargo, insiste en que, si esto vuelve a repetirse, sería muy negativo para el comercio y la economía colombiana.