Ciento treinta y tres cardenales menores de 80 años participarán en la elección del nuevo líder católico, tras la muerte del papa Francisco el pasado 21 de abril.
La Santa Sede anunció que el cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco iniciará el miércoles 7 de mayo a las 16:30 (hora local) en la Capilla Sixtina. La convocatoria llega tras el fallecimiento del pontífice el pasado 21 de abril, y marca el inicio de un proceso clave para el futuro de la Iglesia católica.
Participarán 133 cardenales con derecho a voto, menores de 80 años, luego de confirmarse la ausencia de dos purpurados por motivos de salud: el español Antonio Cañizares y un cardenal bosnio. Además, el cardenal italiano Angelo Becciu, condenado por corrupción, ha renunciado voluntariamente a su participación por el bien de la Iglesia.
“Por el bien de la Iglesia, a la que he servido y continuaré a servir con fidelidad y amor, así como para contribuir a la comunión y serenidad del cónclave, he decidido obedecer como siempre he hecho a la voluntad del papa Francisco y no entrar en el cónclave a pesar de seguir convencido de mi inocencia”, dijo Becciu en un comunicado.
Los favoritos
Entre los posibles sucesores destacan tres nombres: Pietro Parolin, actual Secretario de Estado del Vaticano y considerado favorito por varios sectores; Matteo Zuppi, arzobispo de Bolonia, identificado con una línea progresista, y Peter Erdo, arzobispo de Budapest, representante del ala más conservadora.
El sistema de votación requiere una mayoría de dos tercios para consagrar al nuevo papa, lo que podría lograrse en pocos días. Expertos vaticanos pronostican un cónclave breve, similar a los de elecciones anteriores.
Mientras tanto, continúan las misas de sufragio por el papa Francisco, cuya última ceremonia está programada para el 4 de mayo. El mundo católico espera con expectativa la elección del nuevo pontífice y el rumbo que marcará para la Iglesia en los próximos años.
