En entrevista con Luis Carlos Vélez, la senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal lanzó fuertes críticas contra el gobierno de Petro, el legado de Juan Manuel Santos y el pacto de La Habana, afirmando que la expansión de los cultivos de coca es la raíz del magnicidio de Miguel Uribe y la principal amenaza para Colombia.
La líder de la oposición María Fernanda Cabal habló con el periodista Luis Carlos Vélez sobre la crisis de seguridad que vive Colombia, detonada por el magnicidio del senador y también precandidato presidencial Miguel Uribe. Cabal no solo evocó la época oscura de los años 80 y 90, sino que lanzó duras críticas contra los gobiernos que, según ella, sembraron las condiciones para que el narcotráfico siga dictando la agenda nacional.
“Esto es un déjà vu. Volvimos a la espiral de terror del asesinato de Galán, de Lara Bonilla, de Lo Murtra, de Carlos Mauro Hoyos… y todo alimentado por un país que no aprende”, afirmó con contundencia. Para Cabal, el asesinato de Miguel Uribe es consecuencia directa de un Estado débil y complaciente con el narcotráfico: “Nadamos en 300 mil hectáreas de coca producto del punto cuarto del acuerdo de La Habana. Esa coca fue la que lo mató”.
La senadora responsabilizó al expresidente Juan Manuel Santos de haber dividido a los colombianos entre “amigos y enemigos de la paz”, y de haber entregado curules “gratis” a criminales, incluso a violadores de menores, como parte de un pacto que considera inmoral. “La paz no puede construirse a costa de la justicia, de los principios y de los valores morales”, sentenció.
Defensa de Uribe y advertencia sobre Petro
En su intervención, Cabal recordó que el expresidente Álvaro Uribe Vélez “nos devolvió la patria” en 2002 y criticó la forma en que ha sido judicializado: “Está preso de manera detestable, mientras los responsables del desastre caminan libres”. En contraste, acusó al presidente Gustavo Petro de llevar al país “al cataclismo” con su política energética y sus alianzas ideológicas: “Nos va a poner a cocinar con leña, rodeado de gente que está fuera de la realidad”.
La precandidata no dudó en señalar que el discurso medioambiental del actual gobierno es una excusa para frenar el desarrollo, y que bajo la bandera de causas justas se ha destruido el aparato productivo. “Nos quieren desaparecer a los seres humanos para que el árbol crezca. Han pervertido el feminismo, han convertido la consulta previa en un chantaje, han frenado proyectos estratégicos como el pozo Sirius a cien kilómetros de una comunidad indígena”, denunció.
Autoridad y orden como prioridad
Para Cabal, la única salida posible es restaurar el principio de autoridad: “La seguridad y el orden están por encima de cualquier deseo de paraíso de paz. Ningún Estado puede ceder la seguridad de sus ciudadanos a cambio de una expectativa ilusoria”. Rechazó el romanticismo con que sectores políticos han descrito el estallido social de 2021, al que calificó como “una toma guerrillera financiada por el narcotráfico”.
“Esto ya no es guerrilla contra paramilitares ni izquierda contra derecha, es coca. Un negocio que no se negoció en La Habana. Hay que erradicarla, fumigarla, y mientras tanto dar alternativas reales. Pero hoy estamos perdiendo territorio y vidas cada día”, advirtió.
Críticas a la unidad artificial de la oposición
Ante la pregunta sobre la necesidad de unir a las fuerzas contrarias al petrismo, Cabal fue clara: “¿Unirme con quién? ¿Con los mismos que destruyeron a la Fuerza Pública, que dejaron presos a nuestros soldados y policías, que se arrodillaron ante el narcotráfico?”. La senadora subrayó que la unidad no puede basarse en oportunismo político ni en pactos vacíos: “Si me subo a la tarima antes de tiempo, pierdo la credibilidad que he ganado diciendo las cosas como son”.
Reveló que el Centro Democrático tendrá su candidato presidencial en octubre y que de allí se construirá una alianza para marzo, durante las consultas abiertas, con un objetivo claro: recuperar al menos 50 curules en el Congreso para enfrentar con fuerza al petrismo. “Ese día es clave. Si tenemos voto de opinión, los demás partidos se vendrán con nosotros para la primera vuelta, no al revés”, explicó.
Un llamado a recuperar el rumbo
Cabal cerró su intervención insistiendo en que Colombia necesita un Estado fuerte pero limitado, que proteja al ciudadano y fomente el libre mercado. “La pobreza es inmoral en un país lleno de recursos, donde se privilegia la coca mientras nos dejan sin energéticos. El Estado no puede resolverle la vida a la gente, pero sí debe garantizar seguridad y justicia”.
La senadora no dejó espacio para interpretaciones: el magnicidio de Miguel Uribe no es un hecho aislado, sino el síntoma de un Estado que ha renunciado a su deber más elemental. “Esto se va a mover hacia la derecha, afortunadamente. Pero no hacia una derecha anticuada, sino hacia una que defienda la ley, el orden y la prosperidad. Los colombianos no merecemos vivir con miedo, empobrecidos y sin justicia. Ya es hora de despertar”.