El Ejército Nacional de Colombia asestó un duro golpe a las estructuras criminales que operan en varias regiones del país.
En lo corrido del año, se han desmantelado más de 60 laboratorios para el procesamiento de cocaína y pasta base, afectando de manera contundente las finanzas de grupos armados ilegales como el Clan del Golfo, el ELN y los Comandos de Frontera.
Una de las operaciones más relevantes tuvo lugar en Boyacá, donde tropas de la Primera Brigada, en coordinación con la Policía Nacional, ubicaron y desmantelaron un megalaboratorio en la vereda Balcones, municipio de Santamaría.
Allí se incautaron 817 kilogramos de clorhidrato de cocaína sólida y 220 galones de sustancia líquida, valorados en más de 8.770 millones de pesos.
Además, en el municipio de Sogamoso, fue capturado alias El Flaco, presunto cabecilla financiero de la estructura Jhonier Arenas, liderada por el temido Iván Mordisco.

En simultáneo, tropas de la Sexta División del Ejército intervinieron en Putumayo, donde destruyeron 10 laboratorios de pasta base de coca pertenecientes al GAO-r E48, incautando más de 1.900 galones de insumos líquidos, 678 kilogramos de insumos sólidos y 1.600 kilogramos de hoja de coca.
Otras acciones destacadas se llevaron a cabo en el Norte de Santander, donde la Brigada 30 desmantelaron dos laboratorios del ELN en Tibú y Cúcuta, incautando más de 818 kilogramos de cocaína, 285 galones de acetona y maquinaria industrial usada en el proceso.
En el suroccidente del país, la Séptima División del Ejército ha logrado destruir 54 laboratorios y dos complejos de clorhidrato de cocaína en los departamentos de Córdoba y Antioquia, impactando con una pérdida económica estimada en más de 27.000 millones de pesos a las finanzas del Clan del Golfo.
Sin pausa
En total, las acciones recientes del Ejército han representado una afectación económica superior a los 35.770 millones de pesos, debilitando las estructuras criminales que afectan la seguridad y el bienestar de las comunidades.
