Desde la corporación recordaron que Colombia ha asumido altos costos humanos en la lucha contra el narcotráfico y pidió mantener canales diplomáticos que garanticen estabilidad, confianza y respeto por la soberanía nacional.
La mesa directiva Cámara de Representantes envió una comunicación formal al Encargado de Negocios de la Embajada de Estados Unidos, John McNamara, en la que manifestó su preocupación institucional frente a las recientes declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump. El mandatario aseguró que países vinculados al tráfico de drogas hacia EE. UU. podrían ser objeto de ataques y mencionó directamente a Colombia, lo que generó inquietud en el Legislativo.
En su pronunciamiento, la Mesa Directiva advirtió que estas afirmaciones pueden alterar el clima diplomático. “Las recientes declaraciones del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en las que afirmó que ‘cualquier país que trafique drogas hacia Estados Unidos está sujeto a ataques’ y mencionó directamente a Colombia, despiertan una comprensible preocupación institucional sobre la soberanía de nuestro país”, señaló la corporación en el documento enviado a la Embajada.
La comunicación recordó que la cooperación histórica entre ambos países se ha construido sobre reglas claras del derecho internacional. Por ello, reiteró que “tales manifestaciones resultan contrarias al principio de soberanía nacional, al derecho internacional y a los postulados que han orientado históricamente la relación de cooperación entre nuestras naciones”, subrayando que cualquier insinuación de intervención militar afecta la confianza mutua y las bases de la relación bilateral.
En ese sentido, también destacaron el costo humano que Colombia ha asumido en la lucha contra las economías ilícitas. “Hemos sido los colombianos quienes hemos puesto la mayor cuota de muertes y víctimas en esta lucha: líderes políticos, campesinos, pueblos indígenas, comunidades negras, así como miles de hombres y mujeres de nuestra nación”, recordando que la corresponsabilidad ha sido un principio central del vínculo con Estados Unidos.
Los congresistas firmantes, pidieron evitar discursos que abran interpretaciones vulneratorias de la soberanía. Según el documento, “instamos a que cesen este tipo de declaraciones que puedan afectar la confianza, la estabilidad diplomática y la cooperación estratégica entre ambos Estados”.
Al cierre, el pronunciamiento reafirmó que Colombia seguirá siendo un aliado histórico de Estados Unidos, pero advirtió que la lucha contra el narcotráfico no admite atajos militares y debe sostenerse en cooperación, respeto recíproco y soluciones de carácter internacional.



