El presidente ejecutivo de Fedegán manifestó en su cuenta de X que era inconcebible que además de las dificultades que han debido afrontar los ganaderos en las últimas semanas por El Niño, tengan que estar alertas ante los grupos de invasores de fincas.
“Debemos continuar consolidando las Brigadas Solidarias Ganaderas con el fin de hacer frente, de manera pacífica, a las invasiones de fincas y acompañando a las autoridades cívicas y de policía para que los predios sean restituidos a sus propietarios”.
Con estas palabras, José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), reaccionó al más reciente caso de invasión de fincas que se presentó en Nechí (Antioquia) y que se convirtió en un problema de orden público en el municipio.
La Hacienda Villa Julia, ubicada en Nechí (Antioquia) fue invadida la noche del jueves primero de febrero por más de 300 personas en una acción que, dados los detalles de la misma, parece haber sido planeada con precisión.
Su propietario, Alejandro Tirado manifestó que están “pasando por una situación demasiado difícil, demasiado complicada. Nos invadieron el jueves pasado en la noche y me enteré porque me llamó el administrador diciéndome que nos habían invadido”.
De acuerdo con Tirado, había rumores de que se iba a presentar la ocupación ilegal del predio. “Pero esa noche fue la más amarga de mi vida, porque cuando le pregunté al administrador me dijo que eran alrededor de 300 personas que estaban en todas partes y que estaban hablando de quemarle la casa. Fue muy fuerte”.
Conocedores de los procedimientos que se deben llevar a cabo en estos casos, los propietarios presentaron la respectiva querella. Sin embargo, no ha sido posible la restitución del dominio debido a la violenta arremetida de los invasores contra a Fuerza Pública.
Con invasiones no seremos “potencia agroalimentaria”
Lafaurie Rivera publicó en su cuenta de X que “además de las dificultades que se han presentado por cuenta del fenómeno de El Niño, los ganaderos debemos estar alertas porque se reactivaron los grupos invasores de fincas”.
Recordó que “desde hace ya varios días se presenta un caso en Nechí (Antoquia), en la finca Villa Julia, de la familia Tirado. Los invasores llegaron en montonera, con machetes, han quemado parte del predio y han parcelado el terreno”.
Y pidió al gobierno nacional tomar cartas en el asunto. “Así NUNCA seremos potencia agroalimentaria, no se impulsará la ruralidad y la inversión en el campo se irá al piso”, añadió.
También pidió al gobernador de Antioquia, Andrés Rendón, “apoyar a la familia ganadera víctima de esta invasión”.
También cuestionó: “¿De dónde sale tanta gente en moto con cambuches y machetes, se moviliza por los municipios, por la zona rural y nadie se da cuenta?”
Evidencia de lo complejo del asunto son los informes públicados en medios de comunicación regional y redes sociales: en los videos, se ve primeramente a un nutrido grupo de personas prendiendo fuego a discreción en varios puntos de la finca. Luego, se aprecian violentos enfrentamientos contra la Fuerza Pública, presente el lugar para ejecutar la diligencia de desalojo que ordena la ley.
También trascendió que los invasores de la Hacienda Villa Julia y otras que colindan con el casco urbano del municipio y que vienen siendo objeto de estas acciones, habrían amenazado con atentar contra la vida de la alcaldesa del municipio, razón por la cual se decretó toque de queda en ese ente territorial desde el pasado 3 de enero.
Por su parte, Alejandro Tirado dejó ver su preocupación por el transcurrir del tiempo y el fracaso de los acercamientos pacíficos adelantados por las autoridades administrativas que, aunque ceñidos a lo que ordena la ley, han resultado poco efectivos y más bien dilatorios para los fines que persiguen y, dañino para los intereses del propietario.
“La alcaldesa dice que eso no se puede permitir. Que son acciones de gente que no tiene ni siquiera necesidad, que parece que se quieren robar eso y es un problema demasiado grande, pero, no sé qué pasa, el inspector va y habla con ellos y vuelve y habla con ellos y vuelve y habla con ellos y este es el momento donde yo sigo invadido y donde la gente sigue adentro y donde la gente hace lo que le da la gana, es muy bravo”, dijo con preocupación Alejandro Tirado.
Denunció también que a pesar del corto tiempo que lleva la invasión, ya hay al interior de los invasores, personas que están loteando la hacienda y vendiendo parcelas desde $300.000. Además, dejó claro que ese predio no tiene ningún vicio en la tradición, pues, la titularidad del mismo ha sido desde hace décadas de su familia.
“La gente sabe que esta tierra es de nosotros, que no tiene un solo problema, que es de una sociedad de la cual yo soy representante legal y único dueño, entonces esto no es una tierra ni con problemas ni con extinciones de dominio ni con el uno ni con el otro, no, es una tierra mía, únicamente mía y gracias a Dios y al trabajo”, puntualizó el propietario de la finca.
¿Quién los respalda? ¿Quién los envalentona?
Lafaurie Rivera manifestó que es “¡Increíble que los grupos invasores de tierras tengan más derechos que ganaderos, agricultores y empresarios del campo que ven cómo entran a sus fincas, queman cultivos, parcelan el terreno, amenazan y agreden!”.
Y concluyó: “¿Quién los respalda? ¿Quién los envalentona para que lleguen a una finca específica? ¿Cómo es posible que cientos de personas invadan una finca, se instalen, destruyan y no pase nada? ¡No hay derecho!”.