Los departamentos con más municipios en riesgo de protestas, disturbios o asonadas son Bolívar, Antioquia, Chocó, Sucre, Magdalena, Caldas, Meta, Córdoba, Santander, Cauca, La Guajira y Boyacá.
Debido a diversos factores de riesgo que podrían generar alteraciones del orden público en 133 municipios de 24 departamentos, incluida la capital del país, el defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, expresó su preocupación ante lo que podría ser el escalamiento del conflicto social en el marco del proceso electoral, durante o después de la jornada democrática que se avecina.
“De acuerdo con información acopiada por nuestro Observatorio de Conflictividad Social, identificamos que podrían suceder actos de perturbación al certamen democrático y alteraciones del orden público por una posible inconformidad de ciudadanos con los resultados electorales de este 29 de octubre. Esto, de ser así, derivaría en manifestaciones o protestas, disturbios y asonadas”, indicó el defensor del Pueblo.
Y es que, según el informe de la Defensoría del Pueblo, titulado ‘Advertencia de riesgo de protestas, disturbios y/o asonadas en el marco de las elecciones del 29 de octubre de 2023’, se registraron 11 manifestaciones relacionadas específicamente con las elecciones en los departamentos de Atlántico, Valle de Cauca, Cundinamarca, Córdoba, Casanare, Cesar, entre otros.
Estos casos se suman a los 1252 conflictos sociales registrados entre enero y septiembre de este año, lo cual significó un incremento del 26 % en comparación con el mismo periodo del 2022, cuando fueron reportados 990 eventos de la mencionada naturaleza.
“En lo corrido del año, y en el desarrollo de las actuales campañas, se han presentado distintos tipos de expresiones y manifestaciones sociales. Este tipo de acciones tiene incidencia en la polarización social y política y puede, en el desarrollo de los comicios o posteriormente a ellos, repercutir en el reconocimiento de los resultados”.
Con mayor peligro
Los 12 departamentos con más municipios en riesgo son Bolívar (13), Antioquia (11), Chocó (11), Sucre (9), Magdalena (9), Caldas (7), Meta (7), Córdoba (7), Santander (6), Cauca (6), La Guajira (6) y Boyacá (6). Les siguen Norte de Santander (5), Cundinamarca, Nariño, Huila y Atlántico (cuatro cada uno); Casanare y Cesar (tres cada uno); Caquetá, Risaralda y Valle del Cauca (dos cada uno), y Guaviare y Tolima (uno cada departamento).
Para el caso de Bogotá, revisten riesgo las localidades de Bosa, Ciudad Bolívar, Usme y Sumapaz (en el sur de la ciudad), Kennedy (suroccidente) y Suba (noroccidente).
Factores
Los principales factores de riesgo a tener en cuenta para prever el escalamiento a situaciones de violencia durante la jornada democrática son las irregularidades electorales, como el incremento atípico de inscripción de cédulas y trashumancia electoral. También figuran los antecedentes de protestas, disturbios y asonadas en las elecciones regionales del 2011, 2015 y 2019.
La Defensoría del Pueblo también identificó como riesgo las movilizaciones, manifestaciones o plantones previos al certamen electoral, que durante los primeros nueve meses del 2023 aumentaron 26 % en relación con el mismo periodo del año pasado.
La entidad, además, informó que se deben considerar causa de disturbios las resoluciones sobre solicitudes de revocatoria de inscripción de candidatos, falta de confianza en las instituciones y en el proceso electoral; así como la polarización política y pugnacidad entre las campañas.