El jefe negociador de la guerrilla admitió, en entrevista con Caracol Radio, que la presencia de José Félix Lafaurie en la delegación del gobierno lo tomó por sorpresa, pero que la interpreta como el compromiso público y real por la paz de un sector ideológicamente opuesto y del que esperan mucho en la mesa.
La reanudación de los Diálogos de Paz con el Ejército de Liberación Nacional es tal vez una de las noticias más importantes del segundo semestre de 2022, pues, de llegar a feliz término significaría el desmonte definitivo de la guerrilla más antigua de América Latina y, porque tiene como parte de la delegación del gobierno a José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de Fedegán.
Desde el Comando Central del ELN piensan que la inclusión de Lafaurie en el grupo de negociadores es una muestra clara de la voluntad que actores históricamente antagónicos tienen de encontrar una salida negociada al conflicto armado colombiano. Opinión que también es mayoritaria en los más importantes generadores de opinión pública y la política nacional.
Pablo Beltrán, jefe de la delegación negociadora y segundo al mando en esa guerrilla, a pesar de estar en extremos ideológicos, coincide con el presidente ejecutivo de Fedegán en que el panorama es distinto ahora, por cuenta de la real disposición del presidente Petro para llegar a consensos y sacar adelante dos pilares fundamentales de su programa de gobierno: Reforma Rural Integral y la denominada Paz Total.
“[Este proceso] Es distinto porque este Gobierno ha manifestado públicamente que va a hacer un trabajo por sacar adelante una paz verdadera y definitiva. Entonces tenemos interlocutor que tiene empeñada su palabra y con un mandato muy de todo el estallido social del año anterior. Ese grito de Colombia para que haya cambios es un mandato que hay que cumplir. Nosotros acabamos de hacer unas consultas internas que concluyen que el ELN debe seguir comprometido en buscar una salida política al conflicto”, comentó el jefe guerrillero en entrevista con Vanesa de la Torre publicada también en el diario El País.
Buena fe
En ese sentido, Pablo Beltrán, quien ha sido parte de varias de las negociaciones fallidas del ELN con gobiernos pasados, ve con bastante futuro los diálogos, porque se están concretando hechos que antes eran impensables, como la firma de un Acuerdo entre el Gobierno y Fedegán para la venta de tierras y dinamizar la Reforma Rural Integral.
“Si los más refractarios a los procesos de paz de buena fe dicen ‘bueno, vamos a buscar una solución política’ y la delegación del Gobierno tiene la tarea de recoger los aportes del sector de derecha que ha manifestado públicamente que quiere trabajar por la paz, le damos un compás de espera para que se traduzca en hechos”, comentó Pablo Beltrán.
Finalmente, el jefe guerrillero explicó que las negociaciones y los acuerdos a los que se lleguen son producto de la interacción respetuosa y seria de un grupo de personas que representan a nombre del Estado, la ciudadanía y la insurgencia los intereses de diversos sectores, casi siempre opuestos. “La paz es un asunto de construcción colectiva, una visión común y no solamente la del gobierno”, esbozó Pablo Beltrán y a renglón seguido puntualizó: “El diálogo es hablar con los adversarios”.
