La togada Viviana Polanía señaló que está amenazada y que apelará la decisión de la comisión.
Una suspensión provisional por tres meses fue la sanción que impuso la Comisión Seccional de Disciplina Judicial de Norte de Santander, a la jueza Vivian Polanía, por su comportamiento durante la audiencia que se cumplió el pasado 16 de noviembre.
En el video que se compartió en redes sociales, se aprecia a la togada semidesnuda, fumando y recostada en su cama durante la diligencia de solicitud de revocatoria de medida de aseguramiento contra uno de los procesados por el atentado a la Brigada 30 del Ejército en Cúcuta, hechos que se registraron en junio del año anterior.
Según la Comisión Seccional de Disciplina Judicial, la jueza mantuvo la cámara apagada desde el comienzo de la audiencia.
Sin embargo, en el minuto 57:13 de la diligencia, se enciende la cámara y se puede ver, “con una imagen deplorable, con los ojos entredormidos, despeinada, recostada en una cama, semidesnuda, fumando, y con notoria dificultad en la articulación de las palabras que pronuncia».
Aunque es alertada de la situación, la jueza se desconecta de la audiencia y vuelve a ingresar nuevamente, esta vez con la cámara apagada.
«Tal situación no se compadece con el esmero, respeto y circunspección con el que una juez de la república debe administrar justicia, denotándose una clara falta de respeto de la funcionaria, tanto por su propia investidura pública como respecto de las personas que intervinieron en la audiencia», describe la decisión de suspensión en el que también se destaca como la Juez Polanía despreció la investidura de su cargo.
Aunque la sanción no es definitiva, si incluye durante el tiempo de la suspensión, el no recibir su salario. La investigación seguirá en curso para determinar si habrá una sanción disciplinaria.
Entre tanto, la jueza Polanía en diálogo con Blu Radio, aseguró que nunca se ha desnudado ni ha compartido fotografías de este tipo en sus redes sociales, aunque sube contenido en ropa interior, no interfiere en su trabajo ni está infringiendo la ley.
“Me han hecho bullying varios magistrados de Cúcuta y me amenazaron antes del proceso, que si no cambiaba mi forma de ser me iban a abrir una investigación disciplinaria. Yo no es que aparezca empelota en las audiencias, uno nunca sabe cuándo le pueda dar un ataque de ansiedad”, comentó.
La jueza después de conocer la suspensión señaló que apelará la decisión.