Cientos de familias han salido huyendo y otras tantas se encuentras confinadas por temor a perder sus vidas debido al actuar de las bandas criminales.
El boleteo, la extorsión y los asesinatos vienen en aumento como consecuencia de la guerra desatada entre grupos armados ilegales en el departamento de Nariño, especialmente municipios como Los Andes y La Llanada, en donde el temor se ha apoderado de la comunidad y ha ocasionado que cientos de familias hayan tenido que salir huyendo de sus terruños y otras tantas permanezcan confinadas.
Desplazamiento
Ante el recrudecimiento de la violencia en gran parte del departamento de Nariño, 100 familias se han visto obligadas a dejar sus casas. Al casco urbano de Los Andes han llegado 294 desplazados de zonas rurales desde el mes de junio.
Por otra parte, en las veredas del Vergel, Palmar y Santa Rosa por lo menos 600 personas se encuentran en confinamiento, según informa la Personería local de La Llanada.
Ante la situación, la Procuraduría llamó la atención al Gobierno Nacional para que active mecanismos que permitan poner freno a esta situación; instó al Subcomité Departamental de Atención y Prevención con el fin de evaluar las condiciones en las que se encuentran estas familias.
Asimismo, exhortó a la activación del Comité de Gestión de Riesgo Escolar para garantizar que los niños y adolescentes puedan acceder al servicio educativo en las zonas identificadas en la alerta temprana.
Por otro lado, la difícil situación de orden público que allí se vive podría alterar el normal desarrollo del proceso electoral, razón por la que el Ministerio Público instó a la Registraduría Nacional a prestar atención a la situación y poder garantizar la participación ciudadana en los comicios de octubre.