La Cámara Colombiana de la Construcción cuestionó la decisión del Gobierno Nacional de declarar la emergencia económica y advirtió que no existen condiciones excepcionales que la justifiquen. El gremio alertó sobre impactos negativos en la confianza institucional, la inversión y la planeación del sector constructor.
La Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) manifestó su rechazo a la declaratoria de emergencia económica anunciada por el Gobierno Nacional, al considerar que no se cumplen los requisitos constitucionales para la adopción de un estado de excepción de esta naturaleza.
Según el gremio, la situación fiscal del país, aunque compleja, no responde a un hecho sobreviniente, imprevisible o extraordinario, sino a problemáticas estructurales ampliamente conocidas y debatidas.
En ese sentido, Camacol señaló que recurrir a una emergencia económica carece de sustento jurídico y genera incertidumbre sobre la estabilidad de las reglas económicas e institucionales.
“La emergencia económica no puede utilizarse para reemplazar los mecanismos ordinarios de discusión y decisión fiscal. Colombia cuenta con herramientas legales suficientes para enfrentar sus desafíos sin recurrir a figuras excepcionales que afectan la confianza y la seguridad jurídica”, afirmó Guillermo Herrera, presidente de Camacol.
El gremio recordó que el ordenamiento jurídico colombiano contempla mecanismos claros para la gestión responsable del presupuesto público, como la reprogramación, el aplazamiento y el recorte del gasto, además de instrumentos de disciplina fiscal orientados a garantizar la sostenibilidad de las finanzas del Estado.
A su juicio, omitir estos canales debilita el equilibrio institucional y erosiona la confianza en el marco normativo.
Camacol advirtió que la declaratoria de emergencia envía una señal negativa a la inversión, afecta la planeación de proyectos de vivienda e infraestructura y pone en riesgo el aporte del sector constructor al empleo formal y al crecimiento económico. La construcción, subrayó, ha sido históricamente un motor de desarrollo y reactivación del país, por lo que requiere entornos de certidumbre y estabilidad institucional.
El gremio también hizo un llamado respetuoso a las autoridades competentes para adoptar acciones urgentes que preserven el orden constitucional, fortalezcan los canales institucionales y prioricen soluciones estructurales y responsables que contribuyan a la estabilidad económica del país sin debilitar la confianza de los ciudadanos ni del sector productivo
