Atentado terrorista en Cali deja dos policías muertos y autoridades ofrecen hasta $400 millones de recompensa por los responsables

Un ataque con explosivos en el barrio Mariano Ramos, al suroriente de Cali, cobró la vida de dos subintendentes de la Policía. Autoridades locales, departamentales y nacionales condenaron el hecho, anunciaron una recompensa de hasta $400 millones y exigieron al Gobierno Nacional una estrategia urgente de seguridad para la región.

Cali volvió a ser escenario de un violento atentado terrorista en la madrugada de este martes, 16 de diciembre.

Dos subintendentes de la Policía Nacional, Jorge Leonardo Gómez y Robert Steven Melo Londoño, fueron asesinados tras la activación de un artefacto explosivo improvisado mientras realizaban labores de vigilancia y prevención en inmediaciones del polideportivo María Isabel Urrutia, en el barrio Mariano Ramos.

El alcalde de Cali, Alejandro Eder, condenó enérgicamente el ataque y expresó su solidaridad con las familias de los uniformados.

 “Nuestra ciudad vuelve a ser víctima del accionar terrorista de los grupos ilegales. Son héroes de la patria que hoy enlutan a Cali. Este año, 12 colombianos han sido asesinados por el terrorismo en nuestra ciudad, lo cual es inaceptable”, afirmó.

El mandatario anunció una recompensa de hasta $200 millones por información que permita capturar a los responsables y pidió al Gobierno Nacional priorizar de manera urgente la seguridad. “Si se siguen debilitando las capacidades de la Fuerza Pública, la situación va a empeorar. Contra el terror, Cali no se rinde”, enfatizó.

Por su parte, el general Henry Bello, comandante de la Policía Metropolitana de Cali, entregó detalles del ataque. Explicó que los dos policías fueron trasladados de urgencia a un centro asistencial, donde fallecieron horas después debido a la gravedad de las heridas causadas por un explosivo de alto poder.

Según los primeros análisis técnicos, el artefacto correspondería al perfil criminal utilizado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

El general confirmó que un equipo especial de 20 investigadores de inteligencia y policía judicial fue desplegado desde las primeras horas de la mañana para identificar y capturar a los responsables.

Más estrategia

La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, también rechazó el atentado y reiteró la necesidad de una estrategia de seguridad regional liderada por el Gobierno Nacional.

 “El suroccidente no puede seguir solo. Estos crímenes no pueden quedar en la impunidad”, declaró. La mandataria anunció que la Gobernación aportará $200 millones adicionales, que se suman a los recursos ofrecidos por la Alcaldía de Cali, conformando una bolsa de recompensa de $400 millones para dar con los cabecillas de las estructuras criminales que operan en la región.

Desde la Policía Nacional, el brigadier general William Rincón Zambrano expresó un mensaje de duelo institucional.

“Con profundo dolor e indignación lamentamos el vil asesinato de dos de nuestros policías, héroes de la patria que entregaron su vida al servicio de los colombianos. Su sacrificio no será olvidado”, señaló, al tiempo que envió un mensaje de acompañamiento a los familiares y compañeros de las víctimas.

El atentado también fue condenado por el procurador general, Gregorio Eljach, quien expresó su solidaridad con las familias de los policías asesinados e instó a las autoridades a garantizar la seguridad ciudadana y a actuar con celeridad para identificar y judicializar a los responsables.