Camilo Sánchez, presidente de Andesco y del Consejo Gremial, resaltó que la negativa del Congreso demuestra el funcionamiento de pesos y contrapesos en Colombia. Aseguró que no existe riesgo de default y pidió priorizar el gasto, respetar la institucionalidad y evitar apagar el sistema productivo del país.
Tras la decisión del Congreso de la República de no aprobar la reforma tributaria presentada por el Gobierno Nacional, el presidente de Andesco y del Consejo Gremial, Camilo Sánchez, afirmó que se trata de un mensaje contundente: “la técnica debe estar por encima de la ideología y del populismo”.
Sánchez subrayó que Colombia cuenta con el presupuesto más grande de su historia, y por lo tanto, la discusión no debería centrarse en aumentar los impuestos, sino en priorizar el gasto público, planificar con responsabilidad y garantizar que los recursos se inviertan donde realmente se necesitan.
“No hay riesgo de no pago de la deuda externa. La propuesta representaba menos del 3% del presupuesto nacional. Lo que debe hacer el Gobierno es distribuir bien los recursos, sin sesgos o retaliaciones políticas hacia las regiones”, señaló.
El dirigente gremial también advirtió que una reforma de este alcance, en las condiciones actuales, “hubiera apagado el sistema productivo del país”, afectando la inversión, la confianza y el empleo. Por ello, consideró positivo que el Congreso haya actuado con independencia frente a las presiones políticas.
Asimismo, rechazó cualquier posibilidad de declarar una emergencia económica por este motivo, afirmando que “no existe un hecho sobreviniente que lo justifique”.
Sánchez hizo un llamado a enviar confianza a los mercados internacionales y a los acreedores: “Colombia nunca debe fallar en sus compromisos, porque esa estabilidad nos ha permitido crecer y atraer inversión”.
El dirigente gremial destacó que esta decisión del Congreso representa un precedente clave para la democracia.
“Los pesos y contrapesos siguen funcionando, y por encima de cualquier presión está el país”.
