La fuerte aspirante por el Centro Democrático a la Presidencia de la República, María Fernanda Cabal presentó el balance de su gestión 2022–2026, destacando una intensa labor legislativa y de control político. Impulsó proyectos clave como la protección de segundos ocupantes, la reforma a la JEP, la declaratoria de la Feria de Cali como Patrimonio de la Nación y el sello “Compra lo Nuestro”. Además, ejerció un riguroso control al Gobierno con más de 1000 derechos de petición, decenas de acciones judiciales y debates en plenaria.
En un momento en que Colombia clama por liderazgos con claridad, coraje y compromiso institucional, la senadora María Fernanda Cabal ha consolidado una gestión parlamentaria ejemplar, marcada por la defensa del Estado de Derecho, la transparencia y la protección de los ciudadanos frente a abusos de poder. Con más de 207.000 votos, sigue siendo la senadora más respaldada en la historia reciente del país, y su labor en el periodo 2022–2026 no solo confirma ese apoyo, sino que lo justifica con hechos concretos.
Durante su reciente presentación del balance legislativo y de control político, Cabal no se limitó a enumerar logros, sino que reafirmó su norte: “Mi compromiso es con Colombia”, una frase que ha repetido con firmeza en cada foro, cada debate y cada intervención en redes sociales. “Colombia necesita carácter y coherencia. Voy a seguir dando esta batalla por la verdad, por la ley y por el país”, afirmó, y esas palabras no son solo discurso: son el reflejo de una trayectoria de vigilancia incansable y propuestas transformadoras.
Una legisladora de impacto nacional
En el ámbito legislativo, la senadora ha sido impulsora de iniciativas que tocan fibras vitales de la nación: desde la seguridad jurídica en el campo hasta la preservación de la identidad cultural. Uno de sus proyectos más destacados es el Proyecto de Ley 212 de 2025, que busca proteger a los llamados “segundos ocupantes” —familias campesinas que, de buena fe, habitan predios en disputa— otorgándoles estabilidad jurídica en procesos de restitución de tierras.
También ha presentado una reforma a la JEP (Proyecto de Ley 213 de 2025) que busca establecer plazos razonables y reglas claras, garantizando el debido proceso y el acceso efectivo a la justicia, sin sacrificar los principios del sistema democrático.
Pero su mirada no se limita a lo jurídico. Con sensibilidad por lo nuestro, impulsa que la Feria de Cali y la salsa caleña sean declaradas Patrimonio de la Nación, en un gesto de amor por la cultura colombiana y su proyección internacional. Además, con el sello “Compra lo Nuestro”, busca reactivar la economía nacional desde lo local, fortaleciendo a pequeños y medianos productores.
Varias de sus iniciativas ya son Ley de la República, como la Ley 2128 de 2021, que promueve el uso del gas combustible con enfoque social y energético, y la Ley 1979 de 2019, que rinde homenaje a los veteranos de la Fuerza Pública, brindándoles apoyo integral en educación, empleo y bienestar.
Control político: el contrapeso que Colombia necesitaba
Más allá de las leyes, Cabal ha ejercido un control político riguroso, convirtiéndose en uno de los principales contrapesos del actual Gobierno. En solo cuatro años, ha presentado:
- 1046 derechos de petición para vigilar el gasto público,
- 41 acciones de tutela en defensa de la oposición,
- Más de 130 investigaciones por presunto despilfarro y corrupción,
- 17 quejas disciplinarias contra altos funcionarios,
- 16 demandas de nulidad contra actos ilegales,
- 12 denuncias penales, y
- Más de 30 acciones judiciales para exigir rendición de cuentas.
Además, ha protagonizado 45 constancias en plenaria, 30 proposiciones y 10 debates de control político, citando directamente a ministros y directores de entidades estatales. Una labor que, en sus propias palabras desde sus redes sociales, busca “defender la institucionalidad frente a quienes la quieren doblegar” y “proteger a los colombianos del desgobierno y la improvisación”.
Una mujer extraordinaria, al servicio del país
María Fernanda Cabal no se mueve por encuestas ni por aplausos fáciles. Su coherencia ideológica, su independencia frente a intereses mezquinos y su voz sin miedo la han convertido en una figura de referencia para millones de colombianos que anhelan un país con reglas claras, justicia verdadera y respeto por las libertades.
En un momento en que el país se prepara para definir su futuro, su gestión en el Congreso deja una huella imborrable: la de una mujer que dice lo que piensa, hace lo que promete y defiende lo que ama.
Y como ella misma escribió en redes durante su balance:
“No vine al Congreso a hacer carrera política. Vine a defender a Colombia. Y seguiré haciéndolo con la misma firmeza, con la misma pasión y con el mismo amor por este país”. Esa es María Fernanda Cabal: una senadora, una líder, y, sin duda, una mujer extraordinaria.
