El más reciente informe de la Anif, advierte que el Presupuesto General de la Nación (PGN) 2026, aprobado por $546,9 billones, refleja un panorama de ajuste fiscal que podría limitar la inversión en las regiones más dependientes del gasto público como el Caribe colombiano.
Un equipo de investigación de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), concluye que el presupuesto aprobado en el Congreso representa una reducción de $10 billones frente a la propuesta inicial; que los mayores recortes se concentraron en entidades como los ministerios de Hacienda y Trabajo, mientras que las universidades públicas y la Procuraduría obtuvieron incrementos. No obstante, el Centro de Estudios Económicos, resalta que el proyecto mantiene un monto desfinanciado de $16,3 billones, que el Gobierno espera cubrir con una Ley de Financiamiento que “no parece responder a la realidad fiscal del país”.
“Desde Anif consideramos que esta ley no será aprobada en el Congreso, pues no resuelve las inflexibilidades del gasto ni mejora la eficiencia del sistema tributario”, advirtió el equipo de investigación en su informe semanal.
El documento también evidencia que, entre enero y septiembre de 2025, la ejecución presupuestal total alcanzó el 58,7 %, superando la del año anterior (54,2 %). Sin embargo, el rubro de inversión apenas llegó al 41,1 %, muy por debajo del 63,2 % destinado a funcionamiento y servicio de la deuda. Esta estructura, según la prestigiosa institución de investigadores, limita el crecimiento de la productividad y reduce el impacto territorial de la política fiscal.
En regiones como el Caribe colombiano, donde la infraestructura vial, portuaria y energética depende en gran medida del gasto nacional, los efectos de este ajuste podrían ser significativos. La reducción en inversión pública ralentiza proyectos estratégicos y agrava las brechas de competitividad frente al centro del país.
A esta situación se suma un panorama tributario complejo, para agosto de 2025, la Dian registraba un recaudo $7,7 billones inferior a la meta anual.
La Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), concluye que el desafío fiscal para 2026 será mantener la estabilidad macroeconómica sin frenar la inversión regional, pilar fundamental para la generación de empleo y la competitividad del país.
