Banco Mundial anuncia plan de apoyo para el Caribe tras devastador impacto del huracán Melissa

La noticia llega en medio de una crisis regional marcada por la destrucción de viviendas, comunidades aisladas, pérdidas agrícolas, cortes prolongados de servicios públicos básicos, decenas de muertos, miles de damnificados y turistas atrapados.

A través de su cuenta oficial en X, el Banco Mundial anunció una operación de emergencia para respaldar a los países del Caribe más golpeados por el huracán Melissa, considerado uno de los ciclones más poderosos registrados en el Atlántico. El organismo internacional informó que ya trabaja con los gobiernos de Jamaica, Haití, República Dominicana y Cuba para cuantificar las pérdidas y movilizar recursos de recuperación.

En un comunicado, la institución expresó su solidaridad con las poblaciones afectadas y aseguró que la respuesta combinará cooperación y gestión de riesgos climáticos. “Estamos trabajando con los gobiernos y aliados para evaluar los daños y brindar apoyo financiero y técnico para la recuperación”, señaló la entidad a través de su oficina regional para América Latina y el Caribe.

El impacto del huracán ha sido devastador. En Haití, las lluvias persistieron durante más de una semana, acumulando más de 30 centímetros de precipitación. El desbordamiento de ríos destruyó viviendas y dejó al menos 25 personas fallecidas en la ciudad costera de Petit-Goâve, según las autoridades locales. Equipos de rescate aún intentan llegar a comunidades aisladas por los deslaves y la crecida de los cauces se reporta en medios internacionales.

Jamaica fue otro de los países donde Melissa tocó tierra con vientos de 298 kilómetros por hora, igualando a los huracanes Dorian (2019) y Cayos de Florida (1935) como los más intensos jamás documentados en el Atlántico. El primer ministro, Andrew Holness, comentó en recientes entrevistas, que más de medio millón de personas siguen sin energía eléctrica, la conectividad a internet cayó al 30 % y cerca de 25.000 turistas permanecen atrapados en la isla.

Cuba, por su parte, reportó daños en viviendas, infraestructura eléctrica y cultivos de café y yuca, principalmente en Santiago de Cuba, situación similar vivió República Dominicana: las lluvias y los vientos obligaron evacuaciones preventivas en varias provincias costeras.

Finalmente, ante el panorama desolador, el Banco Mundial recordó que dispone de instrumentos como el Mecanismo de Respuesta ante Crisis (CRW) y el Seguro contra Catástrofes del Caribe (CCRIF), que permiten canalizar recursos de manera ágil. “La cooperación internacional es esencial para salvar vidas y garantizar una recuperación sostenible”, subrayó el organismo al reiterar su compromiso con la resiliencia climática del Caribe.