En un mensaje público, vinculó a sectores aliados de Donald Trump con una estrategia de interferencia electoral en Colombia. También denunció que el instrumento, creado para combatir mafias, fue desviado hacia fines de presión internacional.
El presidente Gustavo Petro cuestionó con dureza la inclusión de su nombre y el de Verónica Alcocer en la lista de sancionados por la OFAC. En su pronunciamiento, denunció un intento de influir en las decisiones políticas de Colombia desde intereses extranjeros, y señaló directamente al expresidente estadounidense Donald Trump y a sus aliados en Florida.
“La lista Clinton se transformó de instrumento contra la mafia en instrumento político y electoral”, afirmó Petro, al considerar que la sanción busca alterar el rumbo democrático del país. Según el mandatario, quienes lograron su inclusión “tienen tanto poder que logran poner entre mafiosos a quien investigó a los asesinos de tu padre Galán”, en alusión a Juan Manuel Galán, quien viene fustigándolo desde hace días.
Petro sostuvo que se trata de “una extensión de la lista OFAC a la actividad política, de terribles consecuencias en el mundo”, y denunció que la medida tiene como objetivo “extorsionar las posiciones soberanas de un presidente para acomodarlas a la voluntad de otro que domina el procedimiento”.
También criticó la respuesta de la banca nacional, al advertir que no está legalmente obligada a acatar sanciones emitidas por una jurisdicción extranjera: “Muestra no solo el colonialismo empresarial, sino las ganas de dañar personalmente al presidente de Colombia”.
Finalmente, el jefe de Estado aseguró que defenderá sus derechos y los de la nación: “Buscaré la forma de defenderme personalmente, pero debo defender también los derechos y la soberanía del pueblo colombiano”.



