Confusión y violencia en Perú: un muerto y más de 100 heridos durante manifestación

Mientras organizaciones de derechos humanos denuncian un presunto disparo de un policía de civil, el ministro del Interior, Vicente Tiburcio, negó la presencia policial en la zona del deceso y pidió una investigación “hasta las últimas consecuencias”.

Una nueva jornada de movilizaciones en Lima terminó marcada por la violencia, la confusión y la desconfianza institucional. Un joven identificado como Mauricio Ruiz Sanz falleció durante las protestas del jueves en el centro histórico de la capital peruana. La Defensoría del Pueblo confirmó su muerte y reportó un balance de más de 100 personas heridas, incluidos 78 policías y 24 manifestantes, además de 10 detenidos.

Según la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH), Ruiz Sanz habría sido alcanzado por un proyectil disparado por un presunto agente policial vestido de civil, en circunstancias aún por esclarecer. La organización exigió garantías judiciales y transparencia en las investigaciones.

Desde la Defensoría, el adjunto para la Prevención de Conflictos Sociales, Fernando Lozada, confirmó la noticia. “Lamentablemente informamos el fallecimiento del ciudadano producto de la situación que será materia de investigación. Se determinarán y deslindarán responsabilidades”, dijo el funcionario a medios locales.

Pero la versión oficial ha tomado distancia del hecho. El ministro del Interior, Vicente Tiburcio, también lamentó la muerte del manifestante, pero aseguró que el dispositivo policial asignado no estaba desplegado en la Plaza Francia, lugar donde ocurrió el deceso.

“En ningún momento nuestras fuerzas han estado en esa zona. No hay personal ‘terna’. Solicito una exhaustiva investigación para esclarecer la muerte de este ciudadano. Lamentamos este hecho que nosotros nunca hemos previsto”, precisó el ministro.

A reglón seguido, Tiburcio también cuestionó el comportamiento de un grupo de personas que participaba de las movilizaciones y asumió actitudes que van en contravía de la protesta social constitucionalmente aceptada. “Algunas personas se han disfrazado con cascos y tapándose, llevando mochilas y objetos contundentes sacados de la vereda”, explicó, en clara referencia a posibles infiltraciones violentas en la marcha.

Este ‘alzamiento’ fue convocado por colectivos juveniles y federaciones universitarias agrupadas en el Bloque Universitario. Estudiantes de San Marcos, PUCP, UNI, La Molina, Villarreal y Cayetano Heredia marcharon junto con integrantes de la Generación Z, quienes en las últimas semanas han encabezado varias protestas en rechazo al gobierno interino. Entre sus demandas destacan la renuncia del presidente José Jerí, el cierre del Congreso, la convocatoria a una Asamblea Constituyente y la derogación de leyes consideradas regresivas, como la Ley “pro AFP”, la de Amnistía y la llamada “ley pro-crimen”.

El presidente interino, José Jerí, se acercó al Hospital Policial para visitar a los agentes heridos, minutos antes de advertir en su cuenta de X que “un grupo reducido pretende alterar la voluntad pacífica de quienes hoy han salido a las calles para expresarse. Ese comportamiento solo busca el caos y la violencia en nuestro país”.

Mientras tanto, la Fiscalía de la Nación abrió una investigación preliminar por la muerte de Ruiz Sanz, a su vez, la Defensoría anunció que acompañará el proceso judicial imparcial y finalmente, los manifestantes anunciaron que las protestas podrían extenderse a otras ciudades en los próximos días.