El Ministerio de Transporte y la Gobernación del Meta confirmaron medidas para atender la emergencia en el kilómetro 18 de la vía Bogotá–Villavicencio, uno de los tramos más críticos del corredor. La inversión de más de $9.000 millones y una tarifa diferencial del 30 % buscan recuperar la movilidad y mitigar el impacto económico.
La vía Bogotá–Villavicencio, principal conexión entre la capital y los Llanos Orientales, atraviesa nuevamente un momento decisivo. Tras el bloqueo adelantado en Guayabetal por comunidades y transportadores, el Ministerio de Transporte informó que, luego de un proceso de concertación con líderes locales, se levantó el paro y se activaron medidas para atender el punto crítico del kilómetro 18.
La ministra de Transporte, Mafe Rojas, señaló que “la concertación es el camino para avanzar en soluciones reales y garantizar la movilidad de miles de familias y transportadores”. La funcionaria anunció que desde este 2 de octubre comenzarán las obras de mitigación, con una inversión total de $9.134 millones: $4.634 millones aportados por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) para mitigación de riesgos, $4.000 millones del Instituto Nacional de Vías (Invías) para estabilización del terreno y $500 millones de la ANI destinados a estudios y diseños definitivos.
Rojas aseguró que el Gobierno trabaja por la seguridad vial y la conectividad de los Llanos Orientales, una región que depende de este corredor no solo para el transporte de pasajeros, sino para el abastecimiento de alimentos y la salida de carga hacia Bogotá.
Por su parte, la gobernadora del Meta, Rafaela Cortés, celebró que “el llamado justo y valiente de toda una región empieza a ser escuchado”. La mandataria destacó que el Gobierno Nacional ya ha dispuesto cerca del 85 % de los recursos necesarios para atender la emergencia y anunció medidas adicionales como una tarifa diferencial del 30 % para todo el transporte a partir de este sábado, así como la suspensión de operaciones de básculas hasta que se restablezca la movilidad por el kilómetro 18.
Cortés subrayó que la solución requiere unidad entre autoridades y comunidades, e insistió en que no basta con la buena noticia de los recursos: es necesario iniciar la ejecución inmediata para evitar que la región de la Amazorinoquía continúe asfixiada por las restricciones en la vía.
Las autoridades insistieron en que lo más importante ahora es la ejecución oportuna de las obras y el seguimiento a los compromisos adquiridos para evitar que se repitan cierres que afectan el abastecimiento, la economía regional y la conectividad de la Orinoquía.



