La colectividad emitió un comunicado en el que califica de estigmatizantes los comentarios del presidente hacia la congresista y precandidata presidencial. Dirigentes de la bancada del Centro Democrático alertaron que la seguridad de la senadora está en riesgo y que cualquier agresión será atribuida al mandatario.
El Centro Democrático lanzó una advertencia directa al presidente Gustavo Petro tras sus señalamientos a la senadora y precandidata presidencial Paloma Valencia. En un comunicado oficial difundido en X, la colectividad le pidió al mandatario que cese “sus ataques infundados” y se concentre en abordar la grave crisis de seguridad que atraviesa el país.
Desde el partido de oposición, calificaron las afirmaciones presidenciales como “infundadas y estigmatizantes”, al considerar que ponen en riesgo la integridad de la congresista. “Cualquier afectación a su seguridad física será responsabilidad directa del jefe de Estado”, expresó el documento. Según la bancada, la estigmatización desde la Casa de Nariño alimenta un clima de hostilidad política que puede derivar en consecuencias irreparables.
La reacción se produjo luego de que Petro, en un mensaje en redes sociales, acusara a Paloma Valencia de haber sido “cómplice” en los 6.402 asesinatos extrajudiciales atribuidos a las Fuerzas Armadas durante la política de seguridad de gobiernos anteriores. La alusión provocó una inmediata respuesta del uribismo, que la interpretó como un intento de trasladar culpas históricas a la oposición y de poner en riesgo a la senadora.
A través de su cuenta personal, el expresidente Álvaro Uribe Vélez aseguró que los señalamientos de Petro “incitan a bandidos a que le hagan daño” a la congresista, comparando la situación con el asesinato de Miguel Uribe. Por su parte, Gabriel Vallejo Chujfi, director nacional del Centro Democrático, fue más tajante: responsabilizó al mandatario de cualquier eventual agresión contra Valencia y lo calificó de “canalla y cobarde”.
Más allá de los calificativos, la controversia se desarrolla en un contexto complejo. En lo corrido de 2025, los indicadores oficiales muestran un incremento del 12 % en los hechos de terrorismo frente al mismo periodo del año anterior. Para la oposición, esta situación refleja la incapacidad del Gobierno de garantizar seguridad a la ciudadanía, mientras se enfrasca en disputas políticas y en un discurso que, a su juicio, profundiza la polarización.
Desde el oficialismo no se ha emitido una respuesta institucional frente al comunicado del Centro Democrático. Sin embargo, el tono de confrontación confirma que la disputa entre Gobierno y oposición trasciende el plano discursivo y se convierte en un debate sobre la responsabilidad del jefe de Estado en proteger no solo a la población, sino también a quienes disienten de su gestión.
La tensión política escala en un momento crítico para Colombia, cuando la violencia repunta y la confianza ciudadana en las instituciones se resiente. En ese escenario, la seguridad de los líderes de oposición se convierte en un tema central de la agenda pública y en un punto de presión adicional para el Gobierno nacional.
